Por Ignacio Mardones
18 junio, 2015

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¡Muchas gracias al hombre que hizo esto por Gertie!

Esta tortuga fue hallada a un lado de la calle en una ciudad de Wisconsin, tenía el caparazón quebrado y estaba malherida. Un auto la había golpeado y quien conducía no se percató del grave daño que le había hecho. Afortunadamente, fue llevada a un refugio de rehabilitación de animales, donde fue bautizada como Gertie y se preocuparon de curarla.

El director del centro, Scott Diehl, diseñó este dispositivo artesanal para que el caparazón sanara con mayor facilidad y rapidez. Él uso pegamento, cables y unos soportes especiales para mantener fijas las partes rotas y que de esta manera fueran uniéndose paulatinamente.

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Wisconsin Human Society

Scott Diehl explicó que el mecanismo usado con cables y pegamento puede parecer poco usual, sin embargo tiene consecuencias positivas, ya que es mucho menos invasivo que otros tratamientos más sofisticados. El método ya se ha usado para curar los caparazones de tortugas antes y ha traído excelentes resultados, la recuperación de la coraza funciona de la misma manera que los huesos humanos, éstos tienen que juntarse lo más posible para que vayan volviendo a fundirse.

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Wisconsin Human Society

Gertie habría muerto sin la ayuda necesaria, por lo que las personas de la organización son unos verdaderos héroes. Ellos le limpiaron las heridas con cuidado y verificaron que no tuviera ninguna otra dolencia. El curioso sistema que armaron con esas monturas fue simple y efectivo, Gertie ha ido sanando de a poco y podrá volver a vivir su vida con normalidad en un refugio donde se preocupan por su bienestar.

¡Bien por Gertie!

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