Es un gran comienzo, pero necesitamos más de éstas.
Las piscinas naturales son la alternativa ideal para quienes prefieren nadar en agua dulce, pero lejos del olor del cloro. Este tipo de piscinas constituyen un ecosistema en sí, a diferencia de las piscinas convencionales donde los químicos suelen matar todo rastro de vida. Una piscina natural es un sistema vivo que cambia de color y de velocidad de crecimiento con las estaciones. Un paisaje para disfrutar todo el año, no solo en los meses calurosos. Como esta hermosa piscina natural en Samoa:
Ya es sabido que en Europa y otros lugares del mundo, hay increíbles piscinas naturales. Pero esta es la primera vez que hay una piscina pública natural en Estados Unidos. Minneapolis es la ciudad donde se llevó a cabo este proyecto que tardó más de 4 años en realizarse y costó 6 millones de dólares. Para alegría de muchos, la piscina natural Weber finalmente se acaba de inaugurar:
Kristen Hopwood
La piscina constará de 28.000 m2 de zona de baño, que incluye una zona de buceo, tobogán y una zona de no-nadadores con una profundidad máxima de 39 cm. En lugar de utilizar productos químicos como el cloro, la piscina del parque Webber se basará en un sistema de filtración biológica a base de plantas. Pero esto no significa que haya plantas en la zona de baño o un suelo de tierra.
Landform
En muchos sentidos, la piscina natural Webber se parece más a un lago que una piscina donde se pueden ver tortugas y ranas, junto con algunas algas para mantener el ecosistema fuerte.
La piscina natural Weber es un gran comienzo, pero necesitamos más de éstas. Cada año h También existen preocupaciones ambientales en torno al uso y eliminación de productos químicos para piscinas duras.
Ahora que Minneapolis ya concretó este proyecto, es de esperar que veamos más de estas piscinas públicas naturales en los años siguientes.
