Por Álvaro Valenzuela
13 julio, 2015

¡No parece una cárcel!

James Conway trabajó casi 40 años en el sistema penitenciario estadounidense y fue llevado a una cárcel en Noruega llamada Halden, quizá una de las más liberales del mundo. En un principio, Conway no puede creer la hermosura del lugar que rodea a la cárcel escandinava y más se impresiona cuando ve el interior: una sala de música, una sala de estar con juegos de video, una cocina bien equipada con cubiertos metálicos y platos de porcelana y así cientos de cosas que jamás se verían en una prisión normal. Su reacción es impresionante:

httpv://www.youtube.com/watch?v=rhjYVRjCZVI

El choque de culturas es impresionante y costaría pensar que se podría hacer algo similar en Estados Unidos o en Latinoamérica. Para el Sistema Correcional de Noruega, los prisioneros deben vivir de la forma más normal posible, para que cuando se reinserten en la sociedad puedan hacerlo sin problemas. Pero James Conway no parecía muy contento: “Sería más fácil entregarles la llave… ¿Para qué están en la cárcel?”, dijo en el video.

Lo curioso es que las estadísticas respaldan a los escandinavos más que a los norteamericanos:

  • Homicidios: intencionados
    – Noruega: 0.6 por cada 100.000 personas
    – Estados Unidos: 6 por cada 100.000 personas
  • Tasa de encarcelamiento:
    – Noruega: 71 por cada 100.000 personas
    – United States: 743 por cada 100.000 (en 2009)
  • Tasa de reincidencia:
    – Noruega: 20%
    – Estados Unidos: 50%-60%

Este programa es parte de un documental llamado “The Norden” que busca enfrentar a personas de Estados Unidos con la cultura de países como Noruega, Suecia, Finlandia y Dinamarca, y sacar algunas conclusiones al respecto…

¿Crees que sería posible hacer algo similar en tu país?