¡Definitivamente fue el mejor cumpleaños de su vida!
Para algunos, el estar de cumpleaños se traduce en vejez, temor por lo poco que se ha conseguido en el pasado, y aún más, por todo lo desconocido que depara el futuro. Otra de las sensaciones típicas de ese día del año, son los nervios, por no tener claridad de sí el resto de tu mundo te recordará, de sí se darán un minuto para saludarte o sí te darán algún regalo, sorpresa o cántico para pedir un deseo y apagar las velas sobre un delicioso pastel.
En resumen, o mejor dicho según mis propias conclusiones, esto se puede deber a las expectativas que cada persona se hace en ese día tan especial y que en muchos casos, no se logran superar. ¿Estaré en lo correcto…? No quiero hablar por el resto del mundo, pero creo que por lo menos, el protagonista del video a continuación, me podría dar la razón.
Se trata de Maymo. Un tierno perro beagle de un blanco radiante y manchas café claro, que al parecer, está muy nostálgico para el día de su cumpleaños. No tiene ni una pizca de energía y su tarde consiste en mirar al horizonte mientras se entierra en el sofá del living. O por lo menos, esa era la idea, antes de que llegaran sus dueños, a mover los muebles y con una caja muy misteriosa.
¿Quieres saber en qué consiste la sorpresa que le prepararon a Maymo para el cumpleaños y que fue capaz de mejorar su estado de ánimo en segundos? Entonces no dejes de revisar el video a continuación, del que sólo te voy a adelantar, este año la sorpresa está multiplicada por 10.
httpv://youtu.be/1kgmfPClsZc
PD: El año anterior, el regalo de Maymo consistió en 100 pelotas de plásticos, absolutamente brillantes y de los colores del arcoíris. Este año, la sorpresa fue nada menos que de 1.000. ¡Wooow!
