Dinos de qué lado de la cama duermes y te diremos cuánto tiempo más durará tu relación

Neee. La verdad me da igual.

¡Very important! Casi como tener mis 8 horas de sueño.

Me gusta cambiar así que a veces de uno y a veces del otro.

El rinconcito, para darle espacio al torbellino nocturno que duerme a mi lado.

La orilla, para desparramarme como verdolaga.

Para estar en paz, prefiero que mi pareja elija. Sí, sí, ya lo sé.

El que esté más cerca del baño.

El que esté más cerca de la ventana.

¿Está mal si digo que esa es una de las 3,762 cosas que no me importan?

Ggrrrr, a mí, siempre a mí, bla bla bla.

Al que duerme del lado del apagador aunque le toque lejos.

Al último que se acuesta. ¡Fácil!

Ni lo menciones po favó. ¡La noche es para dormir!

No, aunque podría tolerarlo pero que no se acostumbre.

Sí, sí, sí. La novela, una serie, noticias... nunca falta algo.

¡No! Que quede claro que tiene su propia camita. ¡Esta es nuestra!

Claro. Hasta tiene su lado favorito de la cama.

No tenemos ni gato que nos maúlle ni perro que nos ladre. So, no.