¡Descubre con cuál las legendarias actrices del viejo Hollywood tienes más en común!

No solo te caracteriza el talento y la gracia con lo que haces lo que más te gusta, sino también tu afán por ir siempre un poco más allá, especialmente para ayudar a las personas que más lo necesitan. Así es como logras tenerlo todo, la belleza, el encanto, el talento, la clase y la inteligencia. Y tal como a la inolvidable Audrey Hepburn, así es como te van a recordar siempre.

Solo el hecho de tener la actitud que tienes te hace todo un personaje, cuentas con la confianza de saber lo que vales y sentirte a gusto en tu piel como pocas personas pueden. Sin embargo, no te tomas demasiado en serio porque sabes que la vida es para disfrutarla y no te importa el qué dirán. Al igual que Marylin Monroe, tu legado vivirá para siempre.

Digámoslo sin rodeos, no eres una persona muy tranquila y tu vida jamás estará libre de drama. Sin embargo, todo eso no es nada comparado con tu solidaridad, la pasión con la que defiendes lo que más te importa y lo mucho que impactas la vida de quienes te rodean. Eres una leyenda viviente y al igual que Elizabeth Taylor, muy pocos son los afortunados que han disfruto de ser parte de ella.

Distinción podría fácilmente ser tu apellido, porque estés donde estés te haces notar sin importar en qué etapa de tu vida te encuentres. Pareces invencible a pesar de que tienes un lado vulnerable, solo porque disfrutas cada minuto de lo que haces y sin ningún tipo de arrepentimiento. Sabes que la vida es muy corta para eso y al igual que Sophia Loren, pretendes hacer de ella un espectáculo inolvidable.

Eres una belleza clásica, especial, única. Aunque cualquiera diría que tu encanto es realmente lo que te destaca entre todas las personas, porque has logrado mantenerlo vivo incluso en las situaciones más difíciles que has vivido, lo que te convierte en una persona que los demás admiran. Tal como Judy Garland, eres una inspiración cuya melodía nunca conocerá el silencio.

La definición de la belleza clásica, eres una persona que nadie dudaría en definir como fabulosa, con todas y cada una de sus letras. Aunque algunos dirían que tu mirada es algo triste, sabes que eso es porque nunca has perdido el sentido de lo que realmente importa, eres tan real como cualquier otra persona… La única diferencia es que, al igual que Grace Kelly, a ti eso te queda mejor que a nadie.