De acuerdo a cómo prefieres la pizza te diremos si eres más como un gato o un perro

¡Te encanta comerlo todo! Sabes que te tienes un fondo pero como un buen perro piensas, ¡siempre se puede más! Además, amas la pizza con el alma humana y perruna.

Eres más sofisticado, guardas tu apariencia y comes con delicadeza, de la misma forma en que un gato se pasea... La compartes con quien tú quieres y si es necesario la guardas, no tienes apuros, todo lo contrario a un perrito.

Bueno, tus gustos nos indican que eres un humano normal. Ni gato, ni perro, un humano y eso está bien porque al final, ¿eso es lo que *realmente* somos, no?