Por Romina Bevilacqua
20 julio, 2015

El futuro de la energía es solar, y el futuro de la energía solar es (literalmente) claro.

En los últimos años la energía solar ha demostrado ser muy efectiva y eficiente como fuente de energía limpia y por lo mismo cada vez son más los que se aventuran a experimentar con ella para crear asombrosos proyectos que muchas veces escapan de nuestra imaginación. Así presenciamos el primer vuelo alrededor del mundo de un avión impulsado por energía solar, hemos visto la inauguración de la primera ciclovía solar en el mundo, una ley en Francia que obliga a los nuevos edificios a colocar paneles solares o plantas en sus edificios nuevos, y prácticos inventos como la pequeña lámpara solar que cabe en una mano.

Pero aún hay otro invento que faltaba agregar a esta lista y que probablemente alegrará a todos aquellos que cuenten con un teléfono celular o a quienes les apasione la estética, ya que los paneles solares transparentes han llegado para quedarse. Cada vez son más los que buscan nuevas aristas en las que desarrollarse y si bien una superficie completamente transparente no es lo primero que se viene a la cabeza al pensar en un material capaz de absorber la luz, los científicos han logrado la forma de hacer de esta idea imposible, algo posible.

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Tanto la compañía Sunpartner Technologies como Ubiquitous Energy, han desarrollado una tecnología que incluso podría convertir la pantalla de tu celular en un cargador de energías limpias. ¿Cómo funciona? Para hacer una célula o panel solar transparente los científicos de Ubiquitous Energy optaron por un sistema diferente que contiene diminutas moléculas de sal orgánica fluorescente que han sido diseñadas para absorber las partes del espectro de la luz que las personas no pueden ver, como la luz ultravioleta e infrarroja. Luego esta luz se guía hacia las células solares fotovoltaicas tradicionales que son capaces de atrapar la energía y la convierten en electricidad.

Ahora…Piensa en los rascacielos y edificios. Piensa en ciudades completas funcionando en base a la energía que las ventanas de sus edificios captan durante el día. ¡Piensa en cualquier superficie!