Por Ignacio Rojas
25 febrero, 2015

Gracias a un novedoso implante, Allen vuelve a sonreír.

Allen Zderad fue diagnosticado años con una enfermedad ocular degenerativa, llamada retinitis pigmentosa. Perdió la vista casi por completo en menos de 10 años.  Hasta el día de hoy, esta enfermedad no tiene tratamiento ni cura efectiva, pero en Second Sight están ideando alternativas novedosas. Si bien el implante no combate la ceguera, sí le ofrece la posibilidad de distinguir formas humanas e incluso ver su propio reflejo en una ventana. Así reacciona el hombre cuando lo usa por primera vez:

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