Por Daniela Bustos
12 junio, 2015
@sophiekristina

Tu hogar también puede ser una persona.

Los veintes son una edad complicada, ya que es durante estos años que empiezas a hacer cosas por ti mismo y tienes responsabilidades que jamás pensaste tener en tu vida. Incluso se podría considerar como un curso de maduración intensiva. Sin embargo, vives en un constante limbo donde todos te dicen que aún eres joven, pero al mismo tiempo te preguntan cuándo piensas formar una familia. Esto hace que sea difícil comprender cuál es tu lugar en el mundo.

Para superar esta crisis existencial, muchos deciden irse de viaje en búsqueda de nuevas respuestas. A lo largo del camino ellos se van convenciendo de que el concepto de hogar necesita algunas modificaciones, ya que no necesariamente se trata del hogar de infancia o el sitio donde vives, sino que es el lugar en el cual te sientes cómodo.

A continuación te quiero dejar las nuevas definiciones de “hogar” con las que concuerdo:

1. Tu hogar puede ser una persona

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@weheartJLO

Se supone que un hogar debería ser un sitio acogedor en el que te sientas cómodo y confiado. Por lo tanto, cuando nada está saliendo como lo planeaste es difícil encontrar un lugar en el que te sientas a gusto. En este caso, muchas veces puede ser la gente que te rodea la que te entregue esta sensación de seguridad. Puede ser un amigo, una pareja o un familiar. Pueden ser sus palabras, el olor de su cabello o la firmeza de sus abrazos, entre muchas otras cosas que te recuerden a un hogar.


2. Tu hogar puede ser tu automóvil

Es en este vehículo de cuatro ruedas donde hemos vivido algunas de las aventuras más divertidas de nuestras vidas y que hoy atesoramos como hermosos recuerdos. Quizás pasaste a buscar a tus amigos para fiestas universitarias, manejaste tu primer viaje en carretera, besaste a tu novio, lloraste tras perder un empleo o pasaste una noche donde no tenías un lugar para dormir. A veces estamos más tiempo manejando que despiertos en nuestros hogares. Por lo tanto, no nos debe extrañar que estos lugares nos recuerden a un hogar, ya que pueden contener algunos de los mejores momentos que hemos vivido.


3. Tu hogar puede ser una ciudad que no conocías

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@gabrielafreiberg

A mí me ha pasado, sólo me ha bastado caminar un par de cuadras para sentir que pertenezco a un lugar que jamás había pisado antes. Es la atmósfera que se siente, los rostros de los desconocidos y los rincones de cada esquina los que te hacen sentir conectado a esa ciudad. El sentimiento es tan grande que incluso puedes terminar extendiendo tu estadía o prometiéndote que regresarás algún día.


4. Tu hogar puede ser un pueblo en el que viviste durante años 

Esta razón es la más obvia de todas y es completamente comprensible que así lo sea. Es decir, caminas por las calles y saludas al panadero, al frutero, al vecino, a la mamá de tu mejor amigo, al hijo de tu profesora, a la mascota de tu ex novio y la lista continúa. Todos te conocen desde que eras pequeño y es difícil no sentirse acogido por estas personas que saben toda tu vida. Cada calle está grabada en tu memoria junto a los recuerdos que tuviste en cada una de ellas.


5. TÚ puedes ser el hogar que estabas buscando

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@mattena

A veces, nosotros mismos debemos tener la seguridad, confianza y el amor que necesitamos para seguir adelante. Esto no significa que no tengas amigos, familia o una casa. De hecho, es bastante bueno que tú seas tu propio hogar, ya que no importa hacia dónde te dirijas, siempre te sentirás en casa.

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