Todo comenzó con un pequeño agujero en la arena. ¡No creerás el resultado!
¿Te imaginas a miles de surfistas armados con palas para cavar juntos un largo sendero? Yo tampoco, hasta que lo vi.
En la desembocadura del río Waimea en Honolulu, Hawai, los surfistas aprendieron a crear sus propias olas artificiales.
Durante la temporada de lluvias en invierno, el río se inunda producto del tapón de arena que crean las altas mareas y así deja de enviar su flujo hacia el océano. Los lugareños vieron la oportunidad de cavar una ruta profunda hacia el mar, dirigiendo toda la corriente por ese lugar y provocando grandes olas. El paso siguiente era subirse a su tabla y disfrutar del resultado.
Si no me crees lo impresionante que puede llegar a ser, mira el siguiente video:
httpv://youtu.be/75MMzKs8MWE
Actualmente existe una gran controversia respecto a este tema, donde los ambientalistas dicen que debería ser un proceso natural y aseguran que se está causando un gran daño a las playas (contribución humana a la erosión). Mientras que otras personas opinan que esto pasaría de todas maneras debido al desborde de las aguas, por lo que los surfistas sólo estarían acelerando el proceso.
Si quieres leer más al respecto puedes leer los polémicos comentarios del video o hacer click aquí.