Algunos simplemente no entienden lo que es descansar.
Escapar a la montaña, armar tu carpa y conversar bajo la luz de las estrellas son siempre los recuerdos que vienen a mi cabeza cuando pienso en acampar. Es una desconexión total de la civilización y una conexión profunda con la naturaleza.
Yo creo que muchos coincidirán conmigo en este pensamiento, pero las siguientes personas llevan la experiencia a otro nivel:
Acá te olvidarás te los dolores de espalda por dormir sobre tierra y rocas, pero deberás tener cuidado de caer y morir. Les presento el “Camping Extremo”, diseñado especialmente para quienes pueden dormir en una hamaca que cuelga sobre varios miles de metros del suelo.
Esta especie de carpa/hamaca se llama Portaledge. El primer prototipo se desarrolló en 1950 cuando los escaladores comenzaron a hacer excursiones más largas y necesitaban pasar la noche en un lugar seguro.
La mayoría viene con un techo que los protege de la lluvia y les da el refugio que necesitan para descansar. Existen distintos modelos que pueden venir en tamaños para 1 ó 2 personas.
¿Te atreves a hacerlo?
Imágenes de Travelettes.
