7 razones para dejarlo todo y tomar un año sabático ¡Ahora!

No tengas miedo de dejarlo todo, probablemente aprendas más en un año de lo que nunca hubieras imaginado.

Las limitaciones más grandes son las que se pone uno mismo. Pero te sorprenderás todas las cosas que puedes hacer y siempre creíste que no podías ¡Lo más difícil es decidir hacerlo! Pero si piensas que es una pérdida de tiempo, a continuación te muestro lo contrario:

1. Tendrás tiempo para descubrir quién eres

Siempre has estado acostumbrado a la rutina. Sí, tienes problemas, pero probablemente no se parezcan en nada a los que deberás afrontar viajando. No estoy diciendo que sean menos graves o algo por el estilo, pero simplemente son distintos. Un año sabático es un viaje interno, donde descubrirás cómo reaccionas frente a diferentes situaciones y conocerás qué te gusta realmente y qué te desagrada completamente. Gracias a esto podrás elegir con autoridad las opciones que tomes acerca de tu viaje y las decisiones de tu futuro, las cuales probablemente sean muy distintas a las que tenías en mente antes de emprender tu aventura.


2. Aprenderás a ser más independiente

Estarás lejos de todos tus seres queridos, y si bien ya has sido independiente en el pasado, ahora realmente no tendrás ninguna ayuda cerca tuyo ¡Y eso lo cambia todo! Te verás forzado a solucionar cada detalle por ti mismo. Deberás llevar a cabo tus cuentas, armar tu círculo de amistades, tomar decisiones importantes y convertirte en chef para no terminar comiendo pasta todos los días. Tú serás el único responsable de tu bienestar. No tendrás a nadie a quien culpar y eso es totalmente aterrador, pero es una experiencia que te enriquecerá como ninguna otra ¡Niños consentidos, bienvenidos a un curso de maduración intensiva!


3. Conocerás la “universidad de la vida”

Es difícil describir las materias que ésta imparte, pero aquí ganarás la confianza que necesitarás a lo largo de tu vida. Si al igual que yo siempre fuiste un poco tímido a la hora de defender tus opiniones, eso no pasará más (o al menos sabrás cuando cerrar la boca y cuando levantar tu voz). Ganarás confianza al hablar y lidiar con desconocidos y situaciones imprevistas. Dejarás la vergüenza de lado y la confianza en tus capacidades indudablemente crecerá cada vez que soluciones un problema. Romperás los límites que creías tener y reconocerás las cosas que son importantes para ti. Cosas que en la mayoría de los casos, no aprendes en un Diplomado.


4. Tendrás amigos alrededor del mundo

Si continuas teniendo el mismo círculo de amigos desde primer grado no tiene nada de malo y, de hecho, probablemente sean tus mejores amigos para toda la vida. Pero creo que como en el mundo existen tantos millones de personas uno no se puede limitar a interactuar siempre con el mismo grupo de gente, mientras hay tantos potenciales amigos allá afuera. Además ¿Qué tan genial es decir que tienes casa en París, Bogotá, Londres, Buenos Aires y Nueva York? ¡Muy genial!


5. Practicarás tus conocimientos en otro idioma

Aprenderás un nuevo idioma porque te verás forzado a hacerlo. Te recomiendo practicar un poco antes de tu viaje y una vez ahí absorber todo el conocimiento que puedas. No te frustres si tu pronunciación no es perfecta o no encuentras la expresión que quieres, respira y exprésate como puedas. Descubrirás que la mayoría es sorprendentemente paciente con quienes no hablan su lengua nativa. Además, con el tiempo mejorarás considerablemente y probablemente termines con un magister en lenguaje de señas.


6. Estarás en una aventura constante

Ya sea que estés mochileando en Australia, recorriendo Milán o enseñando español en Tokio, conocerás cosas nuevas todos los días, aprenderás de la cultura, probarás comida deliciosa (o asquerosa) e irás a rincones hermosos. Lo más importante de todo es que estarás viajando. Si nunca tuviste la oportunidad de estar en el extranjero, éste será el año en el que puedas visitar los lugares de tus sueños, mientras ahorres lo suficiente. Nada es gratis, así que sé ordenado con tus finanzas.


7. Siempre puedes retomar tu vida antigüa

Aunque probablemente no quieras. Después de tantas cosas que experimentaste, volver a la rutina suena bastante aburrido. Lo importante es traer las enseñanzas de vuelta a casa. No dejar de recorrer rincones y asombrarte con todo lo que ves ¡Mirar el mundo como un viajero! Además, no te preocupes por perder experiencia laboral, ya que cada día son más empresas las que entienden el aprendizaje único que se gana viajando. Por lo tanto, esto será algo positivo en tu CV.

Cuando llegues a casa sentirás que todo se mantuvo en pausa dentro de una máquina del tiempo. Toda tu familia y amigos seguirán haciendo exactamente lo mismo que el año pasado, mientras que tú serás alguien completamente distinto.

Imágenes de WeHeartIt.