Tres devastadoras predicciones de Jane Goodall para el 2050 que se están convirtiendo en realidad

Cuando el New York Times le preguntó a la reconocida primatóloga y especialista en chimpancés, Jane Goodall, si la tierra sería un lugar mejor o peor en el 2050, ella que también es Mensajera de la Paz de la ONU y autora de un libro llamado “Razón para Tener Esperanza”, dio una respuesta sorprendentemente sombría. “Veo al mundo en 50 años, tal vez en 100, como un lugar oscuro“, declaró Goodall.

Lo aterrador de la perspectiva de Goodall no es lo distópica que pareció ser en el momento, sino lo real que se ha vuelto. Desde el esparcimiento de las bacterias multiresistentes, las cuales son resistentes a los antibióticos, a la destrucción de los hábitats que albergan remedios esenciales para prolongar la vida, Goodall le dio justo al grano.

Estas son las tres principales predicciones de Goodall que ya se están convirtiendo en realidad:

 1. Las personas van a escapar de sus hogares

“Los refugiados por causa de catástrofes medioambientales van a haber escapado de sus destruidos países de orígenes, ya sea inundados por el aumento del nivel del mar o enterrados por la invasión desértica. En su lucha por obtener acceso al agua y a la tierra, muchas personas enfrentarán la inanición”, comentó Goodall al Times. En 2013, más de 22 millones de personas, muchas de las cuales viven en los países menos desarrollados de mundo, fueron desplazadas debido a los desastres naturales. Una gran parte de estos países tiene la doble carga de estar localizados en puntos calientes del cambio climático, lugares a lo largo del Ecuador, de la costa y en otras partes donde los efectos del calentamiento global estarán magnificados.

Inundaciones se observan a lo largo del río Mississippi, en Clarksville, Mississippi, el 21 de abril del 2013.

A medida que la tierra continúa calentándose, la vida de las personas que viven aquí se volverá más sombría: si no se mudan, las crecientes inundaciones y las temperaturas más altas los harán más susceptibles a las pestes y a las enfermedades. Asimismo, el valor económico de sus tierras va a disminuir y se empobrecerán. Los que inmigren a otros lugares también encontrarán dificultades, ya que estas personas van a tener que empezar nuevos trabajos, probablemente en áreas diferentes, en las cuales no cuentan con la educación o el entrenamiento necesario. Esta es más o menos la visión que Goodall tenía para los próximos 40 años.


2. Va a ser más difícil controlar las infecciones

“A medida que las bacterias desarrollen resistencia a más y más antibióticos y los bosques tropicales que albergan tantas curas medicinales sean destruidos”, comentó Godall, “la ciencia médica no va a ser capaz de hacerle frente a las nuevas infecciones”. Tom Frieden, del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de EE.UU dio la alarma en 2013, al declarar que muy pronto entraremos en una “era postantibiótica”. Desde ese entonces, los recién nacidos en India están comenzando a morir en alarmantes tasas, por causa de infecciones que antes se podían curar. Las mismas “bacterias multiresistentes” mortales son responsables por estas muertes que se están propagando con rapidez por el mundo.

Estas bacterias también han llegado a Estados Unidos, alimentadas en parte por el uso abusivo que el país le da a los antibióticos, tanto en granjas de animales como en hospitales. En 2013 23.000 estadounidenses murieron por causa de infecciones bacterianas que no respondieron al tratamiento antibiótico. Algunas cepas de “bacterias pesadilla” matan hasta la mitad de los pacientes que infectan y estos casos están volviéndose más y más comunes en los 42 estados del país.

Varias enfermedades que EE.UU ha logrado mantener bajo control con el uso de antibióticos, por lo menos hasta el presente, también han desarrollado cepas resistentes a los antibióticos, incluyendo la gonorrea y la tuberculosis. Brotes de enfermedades virales en múltiples países también han resultado difíciles de contener. Más de 19.000 personas han sido contagiadas con el virus Ébola en el mundo y más de 7.000 han muerto.

Los científicos sospechan que el paciente cero, un niño de nueve años, se infectó con el virus tras entrar en contacto con un murciélago de la fruta. La probabilidad que las personas se contagien con enfermedades animales está aumentando a medida que nos vemos forzados a entrar en nuevas áreas, con frecuencia destruyendo los hábitats de los animales en el proceso. Los científicos sospechan que estos son factores impulsores detrás de las emergentes enfermedades, incluyendo el brote de SRAG del 2011 y el brote de la viruela de mono en EE.UU.


3. La deforestación constante tendrá impactos devastadores

Goodall también predijo la destrucción del bosque lluvioso, que desde que dio la entrevista al New York Times en 2012 sólo se ha acelerado. Cada año perdemos una parte del bosque lluvioso del tamaño de Panamá (18 millones de hectáreas, en el 2010 se perdieron 13 millones) debido a la deforestación, gran parte de la cual es causada por la tala de árboles y la agricultura.

La pérdida de estos frondosos bosques no solo afectarán a los animales y plantas que habitan en ellos o a las personas que viven en su entorno próximo. Obtenemos una gran parte de nuestras medicinas, incluyendo los remedios que utilizamos para combatir el cáncer, del bosque lluvioso. Por ejemplo, la popular droga para el cáncer, Taxol se aisló de las semillas del Cefalotaxo drupáceo, un pequeño árbol que crece sólo en suelos profundos parcialmente cubiertos por la sombra, como el tipo albergado por árboles gigantes y protegido por la cubierta forestal.

La madre naturaleza es resistente“, declaró Goodall al Times, “pero se acerca con rapidez el momento en que ella sea maltratada más allá de su habilidad auto restaurativa. Debemos tomar una decisión“.

Visto en: Business Insider