Cuando el ilustrador brasileño Rafael Mantesso se divorció de su ex esposa, ella se levó todos los muebles y dejó una casa vacía con paredes blancas. Todo lo que le quedó a Mantesso fue su bull terrier…y su creatividad. Mantesso comenzó a pintar y dibujar nuevamente y es ahí cuando su perro, llamado Jimmy Choo, le ofreció una pata y posó para unas entretenidas ilustraciones.
“Aunque es bastante desastroso mientras lo estoy fotografiando, él me obedece”, señaló Mantesso a Bored Panda.
“Recién me había divorciado de mi esposa que se llevó todos los muebles de la casa y la casa estaba completamente vacía y blanca. Lo único que tenía era a Jimmy y una casa vacía”, agrega.
” Creo que (los bull terrier) son una raza increíble, por su comportamiento, su personalidad, el amor que demuestran a sus dueños y especialmente por su estética”.
“Él es definitivamente mi mejor amigo y compañero. No me gusta cuando la gente se da media vuelta o cruza a la otra vereda por miedo a encontrarse con él. La gente cree que los bull terrier y los pitbull son asesinos y andan sedientos de sangre”.
“Me encanta pintar y dibujar, pero recientemente volví a hacerlo. Por ahora es un hobby, dibujar pintar e ilustrar usando objetos de mi vida diaria. Ya tengo algunos pedidos para fotografías y estoy pensando en transformarlo en mi trabajo. Ya veremos”, finaliza el artista.
Esta es la fotografía que comenzó todo…