El Papa Francisco ya ha demostrado su gran faceta ambientalista declarando que “Explotar la Tierra es nuestro pecado…Este es uno de los mayores desafíos de nuestros tiempos: convertirnos en un desarrollo que sepa cómo respetar la creación”. Y ahora reafirma su compromiso para combatir el cambio climático.
A fines de 2015 las naciones del mundo se reunirán en París para intentar tomar una decisión para lidiar con las emisiones que generan el efecto invernadero y el Papa Francisco espera que los católicos del mundo, así como también los creyentes de otras religiones, formen parte de esta acción contra el cambio climático.
Eso incluye serios pasos que serán tomados durante el próximo año: Se espera que Francisco le comente a los 1.2 mil millones de católicos del mundo las razones por las cuales actuar en contra del cambio climático es esencial para la fe católica usando un influyente documento que la iglesia llama encíclica. Se ha estado hablando de esto por mucho tiempo, pero se dice que la encíclica será presentada al mundo, a los 5.000 arzobispos y a los 400.000 sacerdotes luego de una visita papal a la ciudad Tacloban en Filipinas, que hace poco fue devastada por un huracán.
En septiembre, el Papa llevará este mensaje a la Asamblea General de las Naciones Unidas en una reunión a realizarse en Nueva York. Se ha dicho que se encargará de hablar personalmente con líderes políticos y representantes de otras creencias, todo esto con la meta de incitarlos a comprometerse a realizar cambios al respecto antes de que se lleve a cabo la reunión en París de diciembre del próximo año.
Si bien no se sabe exactamente cuál será su mensaje, es posible que sea muy similar a lo que le ha estado expresando a los católicos del mundo desde el comienzo de su ascenso al papado. No hace mucho durante este año, Francisco le expresó a la masa en Roma que “si destruimos la Creación, ¡La Creación nos destruirá a nosotros!”. Además se ha referido a la destrucción de las selvas tropicales como un pecado, y bajo su mandato la Iglesia Católica ha generado congresos de cinco días donde se han reunido con científicos, economistas, filósofos, astrónomos y otros expertos para explorar la manera en la cual la Iglesia podría ayudar al medio ambiente y al clima.
A principios de mes, durante una charla llevada a cabo en Lima cuyo tema principal era el cambio climático –que reunió a los arzobispos de la Iglesia de todos los continentes–, el Papa pidió que “se llegue al fin de la era de los combustibles fósiles”. Esto se debe, según comentaron, a la necesidad de priorizar “las necesidades inmediatas de las comunidades más vulnerables”. Tomar en cuenta las causas y efectos del cambio climático es un tema de justicia moral y social para ellos, ya que los impactos de un clima que cambia, afectará de manera desproporcionada a aquellos que tienen menos capacidad de adaptarse (y que, en primer lugar, no fueron quienes emitieron los gases contaminantes).
El amigo de Francisco, el arzobispo Marcelo Sánchez Sorondo, es el Canciller de la Pontifica Academia de las Ciencias Exactas y Sociales. El arzobispo comentó en la conferencia anual que hace para un grupo de católicos británicos, que “existe evidencia física y sólida hoy en día que demuestra que el clima está cambiando a nivel global y que el uso humano de combustibles fósiles contribuye en gran medida a esto”.
Soronado cita el rol único de Francisco como líder religioso y la necesidad de tener una guía moral para asegurarnos que el mundo natural pueda desarrollarse de manera sustentable y que sea socialmente inclusiva. “El problema del cambio climático se ha convertido en un problema importante a nivel social y moral, y la mentalidad sólo puede ser cambiada en los ámbitos morales y religiosos”, comentó.
Por lo tanto, la Academia apoya la iniciativa del Papa de publicar una encíclica o cualquier otro documento que tome en cuenta el cambio climático y la inclusión social para influenciar las cruciales decisiones que deben ser tomadas el próximo año. De hecho, la idea es convenir una reunión con los líderes religiosos de las creencias más importantes para hacer que toda la gente sea consciente sobre el estado del clima y la tragedia que es la exclusión social. Todo lo anterior se hará tomando en cuenta el mensaje bíblico que dice que el hombre es el servidor de la naturaleza e intentando mostrar que el desarrollo humano y medioambiental debe trabajar con la naturaleza y no en su contra, tal como Pablo IV lo planteaba.
Los detalles que rodean esta reunión sobre el clima con los líderes religiosos del mundo no son muy claros en este momento, sin embargo es posible que Francisco encuentre que gran parte de su audiencia esté de acuerdo en comenzar a batallar contra el cambio climático. A principios de año, un grupo de cristianos evangélicos urgió al Presidente Obama a discutir sobre el cambio climático con el Papa, mientras que otros le comentaron al Gobernador de Florida, Rick Scott, que el cambio climático era un tema ‘pro-vida’. Líderes de diversas religiones incitaron a la Agencia de Protección Medioambiental a regular las emisiones de dióxido de carbono de las centrales eléctricas.
Visto en: Think Progress