Por Catalina Vásquez
31 marzo, 2015

¡Los ornitólogos están desconcertados! Podríamos estar frente a la presencia de una nueva versión de “Los Pájaros” a todo color.

Los loriquitos arcoíris (Trichoglossus moluccanus) son una especie de loros comunes en la costa este de Australia. A pesar de que se han convertido en peste luego de haber sido introducidos en el otro extremo del país y en Nueva Zelanda, en sus regiones nativas sus colores brillantes los hacen ser excepcionalmente populares y no es poco común que los australianos dejen alimentos y agua en sus jardines con la esperanza de atraer a algunos de ellos.

Esto es lo que un individuo llamado Bill hacía en su propiedad en Elimbah, al norte de Brisbane. Estaba dejando semillas para los loriquitos y cotorras reales  que habitan los bosques cercanos. Sin embargo, Bill no discrimina a ningún visitantes, así que también dejaba carne picada para las urracascurrawongs y cucaburras que también viven en el área.

LOQRbUP-(1)

Hace unos siete años, Bill notó que los loriquitos estaban comiendo la carne que él estaba dejando para sus contrapartes de un sólo color. “Al principio iban por las semillas pero luego comenzaron a alejar de la carne a las otras aves, lo cual me sorprendió”, le dijo a la ABC.

Eventualmente, Bill reportó el comportamiento al profesor Darryl Jones de la Universidad Griffith, quien estaba sorprendido. “Todos los animales necesitan proteína y no es inusual el que les guste obtenerlo desde una fuente concentrada”, explicó Jones a IFLS. “Incluso entre aves que se alimentan de granos tales como éstas, todas fueron alimentadas con insectos cuando eran bebés. Lo que es inusual es que están comiendo mucha proteína”.

Rainbow-Lorikeets-14May2012-Loganlea-(Small)

Hasta ahora, los pájaros no han mostrado señal alguna de incluir en su dieta animales vivos. Sin embargo, e irónicamente, la carne podría ser incluso más sana que los dulces ricos en azúcar que muchas personas les ofrecen de forma muy ignorante.

A pesar de que se conoce de muchos animales vegetarianos que se alimentan un poco de la carroña cuando están bajos en proteínas o calcio, este comportamiento es bastante excepcional. Los loriquitos se han adaptado perfectamente a alimentarse de néctar gracias a una lengua genuinamente extraña, la cual ha evolucionado con ese fin.

Vyb9rlc

La merienda de carne ocasional es una cosa, pero el invertir energía en asustar a aves más grades requiere de un gusto importante por un alimento que sus ancestros no han estado digiriendo desde hace millones de años. “No tiene sentido”, agregó Jones a la ABC. Estas aves carnívoras pueden incluso desarrollar una enfermedad de hígado graso debido a la carne picada de animales sedentarios de granja. Y tampoco está claro el por qué especies como la urraca australiana, conocida por sembrar el pánico entre los ciclistas, están permitiendo que los loriquitos los alejen de su comida favorita.

El comer alimentos inusuales puede ser una señal de malnutrición o de desplazamientos ecológicos, pero tal como Jones dijo, “Las aves se ven extremadamente saludables en esas fotografías”.

pmdxuMg

Jones ha hecho un llamado a quienes hayan sido testigo de aves comportándose de una manera similar para que lo contacten a d.jones@griffith.edu.au. Él dice que desde el momento en que se supo de esta noticia, se ha visto bombardeado de historias de comportamientos similares. “Estoy considerando el trabajar con un veterinario para estudiar el impacto que esto tendrá si gran parte de su dieta la obtienen de la carne”. Sin embargo, Jones cree que en la mayoría de los casos, los pájaros sólo obtienen un pequeño porcentaje de su dieta por parte de los alimentos que los humanos les dejan en sus jardines, añadiendo que “Si esto ocurre a gran escala, estoy seguro de que sería catastrófico”. Ninguna de las aves ha sido etiquetada, así que Jones dice no saber si el mismo individuo ha estado comiendo carne durante un gran tiempo, y si el comportamiento está siendo enseñado a sus hijos. “Las aves australianas son famosas por tener vidas muy largas, y los loriquitos arcoíris pueden sobrevivir hasta veinte años”.

Visto en IFL Science