Unos activistas de Letonia de un grupo pro bicicletas llamado “Andemos en Bici“, crearon un osado recordatorio visual del espacio ocupado por los autos en una carretera típica. Para lograr esto, el grupo fabricó esqueletos de bambú en forma de autos reales y los montaron en sus bicicletas. Los activistas luego se pasearon por las calles de Riga durante varias horas para resaltar lo absurdo de utilizar un auto grande para transportar a una sola persona. El truco fue organizado como parte de la Semana Europea de la Movilidad, una campaña en curso que explora la movilidad urbana sostenible en toda Europa.