No sabe cuánto tiempo más le queda de vida, pero se propuso disfrutar todos los días como si se tratase del último y grabar los momento felices junto a ella.
Dave Meinert, un director y cineasta de Cape Town, Sudáfrica, decidió hacer de una historia lamentable, una maravillosa. Todo comenzó cuando conoció a una perrita Gran Danés de color blanco y la adoptó, a pesar de que había nacido con problemas genéticos, que según los veterinarios quedaría sorda y ciega, y de que le habían diagnosticado tan sólo unos meses de vida.
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La nombró Pegasus, y además de ofrecerle todo el cariño que se merecía y lo necesario para que se mantuviera en las mejores condiciones, comenzó a registrar todos los momentos que pasaban juntos, los cuales tenían que estar llenos de caricias, alegría y diversión. La saca constantemente a pasear, le presenta a otros perros para que tenga amigos e incluso la lleva a navegar para que conozca esa sensación de la libertad y paz que sólo el mar pueden generar. Pero lo más importante… creó el Proyecto Pegasus, donde con otro amigo, experto en el entrenamiento de mascotas, le enseñó a andar en una trotadora para que así pudiese ejercitarse a pesar de sus dificultades:
https://youtu.be/H7rS24TZImk
Fueron 5 meses de grabación en que Pegasus mejoró en la trotadora y se convirtió en una hermosa adolescente. Un video que genera nostalgia, pero también una sensación de esperanza de que la perrita pueda seguir desarrollándose y de que sea capaz de sobreponerse a todos los diagnósticos negativos.
Dave Meinert
Dave la adoptó cuando era una cachorra de 4 semanas y ya han pasado más de 5 meses de una maravillosa amistad. La ha visto crecer sana, juguetona y alegre, pero sin olvidar ni por un segundo que ese día puede ser de los últimos. Un recordatorio de la vida, para aprender a disfrutarla al máximo con los que más quieres y haciendo lo que más te gusta.