Un nuevo estudio descubrió que los hongos alucinógenos tienen un extraño beneficio para la salud mental.
Últimamente las noticias sobre los beneficios de la marihuana parecieran multiplicarse, sin embargo los hongos psicodélicos o alucinógenos todavía son ignorados por la ciencia y muchas veces criticados como una droga sin ningún tipo de beneficio medicinal. Pero aunque no lo creas, esta situación podría cambiar sobre todo después de la publicación de un nuevo estudio en el Royal Society Interface.
Para la investigación examinaron los cerebros de 15 personas saludables a las que se les inyectaron alucinógenos (psilocibina) por vía intravenosa. Lo que descubrieron luego fue que una vez que el cuerpo recibió esta sustancia, el cerebro generó más relaciones interregionales. Esto significa que aquellas áreas del cerebro que no suelen comunicarse entre sí, comenzaron a intercambiar impulsos neuronales. Con estos hallazgos podrían explicarse algunos de los fenómenos extrasensoriales que las personas experimentan cuando ingieren este tipo de hongos.
Aún no es claro si esas conexiones persisten en el tiempo, pero al menos se descubrió que podría ayudar a aquellos que sufren de depresión. ¿Cómo? En vez de mantener pensamientos negativos y depresivos, la psilocibina podría entregarles una nueva perspectiva para cambiar estos dañinos hábitos mentales.
Según otro estudio publicado en el British Journal of Psychiatry: “Existe evidencia de que la psilocibina mejora la recolección autobiográfica y esto implica que puede ser útil en la psicoterapia como herramienta para facilitar el recuerdo de situaciones felices y positivas o para revertir los sesgos cognitivos negativos“. Esto basándose en estudios anteriores que señalan que las personas con depresión suelen recordar momentos negativos con más fuerza que los neutros o positivos, y que los hongos psicodélicos son capaces de realzar memorias positivas mejorando el concepto de vida individual de cada persona.
Aunque esto parezca prometedor para seguir investigando las propiedades que estos hongos podrían tener, los alucinógenos aún son considerados una sustancia “conflictiva” donde los estudios son limitados –si es que llegan a ser permitidos–. En muchos países entre ellos Australia, Nueva Zelanda, Alemania, Turquía o el Reino Unido, los hongos alucinógenos son considerados sustancias ilícitas y, como es el caso de Europa, están catalogados como drogas de nivel 1 (Schedule 1) y se definen como fármacos con un alto potencial de abuso.