Los enigmáticos “círculos de hadas” en Namibia acaban de convertirse en algo aún más misterioso

Después de que sepas lo que los científicos acaban de descubrir sobre estas extrañas figuras en la tierra, estarás tan confundido como yo. 

Los han atribuido al trabajo de vida extraterrestre, gases venenosos, la autorregulación del crecimiento de la hierba y más recientemente a termitas, pero la verdad es que la razón de por qué se forman estos extraños círculos en el suelo de Namibia aún continúa siendo un misterio. Cuando en 2013 un estudio atribuyó la creación de estos círculos que están presentes en alrededor de 1.800 km del suelo a las termitas, parecía que el gran misterio de la naturaleza se había resuelto. Sin embargo en 2014 otro estudio destruyó esa teoría cuando probó que los círculos de vegetación conocidos como “círculos de hadas” en realidad no son tan aleatorios como parecían y que siguen ciertos patrones –los estudios que habían analizado a las termitas en territorios áridos hasta entonces, mostraban distribuciones desordenadas y a mayor escala que las de Namibia–.

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Pero ahora una nueva investigación ha descubierto otro fascinante aspecto de los curiosos círculos: las manchas en la tierra comparten un patrón matemático con las células de la piel del pez cebra o danio cebra. “Es una similitud extraña y completamente asombrosa”, señaló uno de los investigadores, Robert Sinclair, que se desempeña como profesor de matemáticas en el Instituto de Ciencia y Tecnología de Okinawa. Los científicos además descubrieron que estas manchas que parecen pequeños cráteres no sólo comparten un patrón con las células de la piel, sino que también tienen un ciclo de vida –nacen, crecen y mueren–, y pueden ser afectados por la competencia de recursos en el espacio en el que están.

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Una vez que las analizaron a escala macro el patrón de los círculos de hadas y lo compararon con la distribución de las células de la piel, descubrieron que ambos compartían distribuciones muy similares. “Es difícil decir por qué son tan similares, pero el hecho de que se parezcan tanto entre sí ya es importante“, dice Sinclair. “Esto sugiere que tal vez haya patrones diferentes que cubren diferentes escalas”, añadió.