Por Catalina Vásquez
15 junio, 2015

Hay veces en que pareciera, los pronósticos están hechos para romperse. 

De repente la vida de Sammi, un perro springer spaniel, cambio de manera radical. La razón: Tiene 8 años de edad y un problema degenerativo en los huesos de su cuello, que lo hicieron necesitar de una operación, y por consiguiente, empeorar lentamente su estado de salud y quedar tetrapléjico. Algo realmente horrible para una tradicional raza de perro de caza que desde el siglo XVII corre por los campos abiertos de Inglaterra, buscando y recuperando las presa a las que sus amos estén disparando, y es por esto mismo que Janie, su dueña, decidió no podía quedarse de brazos cruzados.

Lo llevó al centro de rehabilitación California Rehabilitación Animal CARE, en Santa Mónica, Estados Unidos, donde fue tratado a diario. Y así, gracias a toda la dedicación y persistencia de los terapeutas y veterinarios, 3 meses después, este pequeño dejó a todos con la boca abierta, cuando Janie entró por la puerta principal del centro y se lo encontró, caminando hacia ella, lleno de energía y sin ningún tipo de ayuda.

“Me siento absolutamente pagada con todo lo que lograron”, comentó Janie al centro y agregó: “Los primeros expertos que lo trataron me dijeron que nunca volvería a caminar, y si me hubiese quedado con esa opinión, tendría a un perro deprimido y sufriendo… pero por el contrario, y gracias a este grupo de gente maravillosa, es que hoy está andando y moviendo la cola. Lo más probable es que todos en casa se peleen por sacarlo a pasear. No podrán más de la felicidad cuando lo vean llegar caminando por su cuenta”.

No te pierdas el emocionante momento en que Sammi se encontró con su dueña en el video a continuación: