Por Romina Bevilacqua
7 octubre, 2014

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La Gran Barrera de Coral al noreste de Australia es el mayor arrecife de coral del mundo y es reconocido por su extensa biodiversidad. En él habitan más de 1500 especies de peces y siete tipos diferentes de tortugas marinas, sin contar los alrededor de 350 tipos de corales que generan el ambiente propicio para la vida marina.

Lamentablemente, este paraíso submarino se encuentra amenazado y según el gobierno australiano, una de sus mayores amenazas son los efectos que ha producido el cambio climático en el lugar y que a largo plazo podrían afectar a la zona al aumentar la acidificación del océano, el aumento de las temperaturas del agua y del nivel del mar e incluso un aumento en eventos climáticos extremos –como por ejemplo ciclones tropicales–.

Pero hoy, según algunos expertos en arrecifes, las propias autoridades del Parque Marino la Gran Barrera de Coral podrían ser una amenaza para este. Sobre todo, porque recientemente habían aprobado que millones de metros cúbicos de residuos de dragado fuesen arrojados en las cercanías del parque marino. Por suerte, a principios de septiembre estos planes fueron descartados –en parte debido al gran revuelo y fuerte crítica que causó la noticia– y esos residuos serán eliminados en tierra firme y no en el mar.

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Sin embargo, este cambio de planes no ha cambiado la impresión de algunos expertos. El ex director científico del Instituto Australiano de Ciencias Marinas, el Dr. Charlie Veron, señaló al respecto que las autoridades del parque marino ya no tienen la experiencia suficiente para proteger la Gran Barrera de Coral luego de que redujeran 2.8 millones de dólares de su presupuesto, lo que llevó a las autoridades a perder 17 miembros del equipo incluyendo a 5 directores.

Hemos perdido nuestra delantera como líderes en la investigación de los arrecifes; ya no somos capaces de proveer la ciencia necesaria para protegerlos”, dijo Veron a la radio ABC.

“Ha perdido credibilidad al permitir el vertido y ahora están perdiendo a sus miembros del equipo más efectivos”, agregó.

El Dr. Veron, considerado como uno de los mayores científicos de arrecifes de coral, además señaló que las autoridades del parque marino perdieron su credibilidad y “cometieron un suicidio” cuando autorizaron al puerto North Queensland Bulk Port a arrojar residuos de dragado en el parque marino como parte de su proyecto para expandir el puerto de carbón Abbot Point.

La Sociedad por la Conservación Marina Australiana (Australian Marine Conservation Society) y el Fondo Mundial para la Naturaleza en el país (WWF Australia)también han hecho un llamado a que se demuestre que las autoridades aún se mantienen independientes y que todavía cuentan con los recursos necesarios para proteger al arrecife.