A dos años de la creación de la Escuela de Música y de las Artes Rapa Nui por la ONG Toki, los niños finalmente tendrán un espacio propio para realizar sus clases. Pero no se trata de cualquier lugar, la nueva escuela se trata de una construcción única en Latinoamérica y 100% autosustentable construida con materiales reutilizados. Ya se inauguraron las primeras salas del que será un edificio construido en forma de flor de ocho pétalos. En él habrá salas para clases de música, danza y cultura rapanui, una oficina de ONG TOKI, una sala de recepción, cocina, duchas, baños y bodegas.
La primera etapa de construcción comenzó el pasado 17 de noviembre de 2014 y se espera que la escuela esté finalizada para septiembre de 2015. Su directora, la reconocida concertista en piano y modelo pascuense, Mahani Teave, explicó la importancia que tiene esta inauguración, tanto para los 70 niños que asisten a la escuela, como para toda la comunidad rapanui: “Estamos profundamente agradecidos de este sueño hecho realidad, esta perfecta unión de voluntades que ha hecho que decenas de personas de la Isla, del continente y del mundo entero levantaran este lugar: la primera escuela sustentable de América Latina. Quiero agradecer a todos aquellos que creen que la música es fundamental para lograr sociedades mejores, con niños con todo su potencial expresivo desplegado”, aseguró la pianista.
La construcción de la escuela está a cargo del arquitecto estadounidense Michael Reynolds, conocido en el mundo como “garbage warrior”. El líder de Earthship Biotecture, utiliza un sistema de construcción autosustentable, que combina materiales básicos como el cemento, con elementos reutilizados, como latas de aluminio, botellas de vidrio y neumáticos. Este sistema lo ha utilizado por más de 40 años y ha construido en lugares tan diversos como Malawi, Ushuaia y Nueva York.
Michael Reynolds reflexiona sobre este proceso: “Me sigo sorprendiendo del gran esfuerzo y la energía que la gente le pone a estos proyectos, dado su propósito. Estoy orgulloso de cada una de las personas que llegó de múltiples lugares del mundo a levantar esta hermosa iniciativa. Acá mucha gente local logró comprender la importancia de poder reutilizar la basura y lo más importante, se ha creado un lazo que nunca morirá”.
Mira el increíble proceso de su construcción:
Primero debían preparar el terreno.
Reunieron los neumáticos para poner las bases para construir sobre ellos la escuela.
Al colocar tierra dentro de los neumáticos, actúa como aislante térmico.
De a poco el edificio fue tomando forma…
Botellas de vidrio, latas de aluminio y botellas plásticas son algunos de los materiales que utilizaron como “ladrillos”.
La escuela cuenta con una celda botánica que filtra aguas servidas…
y un tanque para almacenar agua de la lluvia
Ya se ve cómo va a quedar la escuela…
¡Y todo gracias al apoyo de decenas de voluntarios y la comunidad Rapa Nui!
Visto en: La Segunda, Facebook Toki