Los refrigeradores son un invento reciente. Durante miles de años la gente tuvo que vivir sin ellos y hacer uso de distintas técnicas para mantener su comida en buen estado y sin la ayuda de la tecnología. Hoy en día la mayoría de los refrigeradores están llenos de alimentos que probablemente durarían el mismo tiempo y tendrían mejor sabor, si no se hubieran perdido en el fondo del refrigerador. Terminan siendo muebles costosos y con aire acondicionado para guardar lo que Shay Salomon llama “compost and condiments” (abono y condimentos).
Algunas personas han buscado alternativas para este costoso sistema que genera numerosos residuos. Kris De Decker, de la revista Tech Magazine, se rehúsa a aceptar que cada problema tenga una solución altamente tecnológica y muestra el trabajo de la diseñadora coreana Jihyun Ryou, quien dice: “hemos traspasado la responsabilidad de cuidar los alimentos a los refrigeradores. Hoy en día no observamos nuestra comida y no sabemos cómo tratarla”.
Ella ha desarrollado una serie de diseños modernos, que se basan en técnicas tradicionales que aprendió de su madre y otras personas mayores de su comunidad. “El tradicional conocimiento verbal que ha sido acumulado por experiencias y transmitido mediante el boca a boca”.
Éste es un ejemplo interesante y complicado. Muchas frutas emiten gas etileno a medida que maduran; mucha gente pone sus tomates en papel o plástico para hacer que maduren más rápido. Es por eso que poner la fruta en el refrigerador no es tan recomendable. El etileno se acumula dentro de la caja sellada y la fruta se pudre más rápido. Pero algunos vegetales reaccionan de manera diferente al etileno. En el caso de las papas y las cebollas, el etileno suprime su proceso de germinación. Ryou dice lo siguiente:
Las manzanas emiten una gran cantidad de gas etileno, lo que acelera el proceso de maduración de las frutas y verduras que se guardan junto con las manzanas. Sin embargo, si se combinan con las papas, las manzanas impiden su germinación.
La diseñadora se refiere a los vegetales de raíces verticales:
Al mantener las raíces (y tubérculos) en posición vertical, permite que el organismo ahorre energía y permanezca fresco durante más tiempo. Esta plataforma proporciona un lugar para que se coloquen fácilmente, utilizando arena. Al mismo tiempo, la arena ayuda a mantener la humedad adecuada.
Kris de Decker señala:
Mantener las verduras en arena ligeramente húmeda ha sido un método de almacenamiento durante muchos siglos. Si bien las bajas temperaturas son favorables para las verduras como las zanahorias, la alta humedad es igualmente importante. Mantenerlos en la arena mojada puede ser una buena forma de mantener ambas condiciones. Eso sí, no te olvides de regarlas de vez en cuando.
Un huevo tiene millones de agujeros en su caparazón, por lo que absorbe fácilmente los olores y las sustancias a su alrededor. Esto crea un mal sabor si se mantiene en la nevera junto con otros alimentos. Esta repisa proporciona un lugar para los huevos fuera de la nevera. Además, se puede comprobar la frescura de los huevos al ser sumergidos en agua; mientras más frescos, más se hunden.
En Estados Unidos, todos guardan sus huevos en el refrigerador, sin embargo, pocas personas hacen lo mismo en Europa. Los huevos pueden durar por días e incluso semanas si se mantienen en una repisa o despensa. En los supermercados europeos, los huevos no son refrigerados. La integración del agua en la plataforma de almacenamiento de huevo es muy ingeniosa; según about.com, si un huevo:
1. Se hunde hasta el fondo y se mantiene ahí: tiene tres o seis días.
2. Se hunde pero flota en un ángulo: tiene más de una semana.
3. Se hunde pero se balancea sobre uno de sus extremos: tiene más de dos semanas.
4. Si flota: es demasiado viejo y hay que botarlo.
Los huevos actúan de esta manera en el agua debido a la bolsa de aire que contienen. A medida que los huevos envejecen, el saco de aire se hace más grande debido a que la cáscara del huevo es una membrana semi-permeable. Cuando el saco de aire es muy grande, hace que el huevo flote. Por lo general, los huevos pueden ser consumidos hasta tres semanas después de haber sido comprados.
Probablemente esta es la idea más conocida: añadir un poco de arroz a las especias, para que absorba la humedad y las mantenga secas. Sé que mi abuela lo hizo…Kris concluye:
“Mientras más comida puedas mantener fuera del refrigerador, más pequeño será el refrigerador que necesites y menos energía consumirás. Los diseños descritos anteriormente muestran una novedosa manera de hacer esto, aunque hay que recordar que estas son obras de arte y no productos de consumo. Utilizar métodos similares para almacenar los alimentos en un sótano o en un espacio bien diseñado y de la manera tradicional, dará mejores resultados”.
Refrigeradores más pequeños utilizan menos energía y por supuesto, ocupan menos espacio. Además, estas técnicas no son reliquias del pasado, sino que modelos para el futuro, que en las manos de un diseñador con talento, también pueden ser obras de arte.
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