La versión ecológica de un automóvil de Mercedes-Benz excedió las expectativas. Aunque de coche prácticamente tiene sólo el exterior y las ruedas, ya que su interior parece más una sala de estar compacta. Pero lo mejor de todo es que además de ser un coche respetuoso con el medio ambiente y con tecnología avanzada, se maneja solo.
Con su modelo F 015, Mercedes Benz se subió a la tendencia de la movilidad eléctrica para reducir el consumo del contaminante petróleo y sus derivados responsables del cambio climático y el calentamiento global, y le dio un giro futurista que podría revolucionar la industria automotriz. Este modelo estaría en las calles para el 2030.
1. Está diseñado para que te olvides de volver a manejar
Además de no requerir de un conductor para desplazarse, este coche cuenta con asientos que se pueden girar en 180º en caso de que los pasajeros quieran interactuar entre ellos.
2. El interior está cubierto de pantallas táctiles
Aunque Mercedes-Benz se ha resistido a utilizar pantallas táctiles en el pasado, el interior del F015 incluye largas bandas de pantallas touch no sólo en el tablero sino que también en los asientos de los pasajeros.
3. Es seguro para ti
Su chasis y carrocería está hecho de materiales resistentes como el aluminio y la fibra de carbono para un peso estimado en un 40% inferior al de uno convencional con el mismo tamaño. Cuenta con airbags externos como medida de protección, un conjunto de sensores, radares y cámaras para controlar todo lo que sucede a su alrededor.
4. Y también se preocupa de los peatones
Cuenta con un sistema de LEDs que sirven para iluminación y para comunicación con el exterior ya que, por ejemplo, pueden proyectar una trayectoria de luz para hacerles saber a los peatones que es seguro cruzar por delante del vehículo o mostrar si está en modo autónomo o con piloto si la iluminación es azul o blanca.
5. Funciona con hidrógeno
Su sistema de propulsión está basado en un sistema híbrido de pila de hidrógeno y baterías eléctricas de última generación que ofrecen una autonomía superior a los 1.100 kilómetros. Cuenta con dos motores eléctricos que aportan 272 CV a su tracción trasera y que permite una velocidad máxima de 200 Km/h con un consumo de 0,6 kilogramos de hidrógeno cada cien kilómetros y cero emisiones.
Puede que no se construya nunca a nivel masivo porque se trata de un prototipo, pero nos puede dar una idea de por dónde irá el futuro del coche inteligente, ecológico y completamente autónomo.
Visto en: PCWorld