Un hombre chino ha sido encarcelado por 13 años por comprar y comer tigres en peligro de extinción, según informan los medios estatales. El hombre, identificado como un hombre de negocios acaudalado de apellido Xu, organizó tres viajes a la provincia sureña de Guangdong para un total de 15 personas el año pasado para comprar tres tigres, los cuales transportó a su tierra natal de Guangxi, dijo la agencia de noticias Xinhua en la tarde del pasado martes 30 de diciembre.
Xu no sólo compraba los tigres para matarlos y asar su carne para comerla, también hacía una bebida alcohólica con su sangre y guardaba sus garras y otras partes de su cuerpo que fueron encontradas en su refrigerador e incautadas por la policía cuando registraron su casa. Además se encontraron partes de 16 geckos y una cobra. El informe no señaló de dónde salieron los tigres, pero se sospecha que fueron introducidos ilegalmente al país. Originalmente, Xu recibió su sentencia en abril y luego apeló, pero la semana recién pasada una corte rechazó su apelación.
En China hay quienes creen que la carne de tigre tiene propiedades que mejoran la salud y que funciona como afrodisíaco, lo cual ha creado un auge en el comercio de productos de tigre en los últimos años junto con el auge económico del país. China es hogar de tigres, mayoritariamente en el noreste lejano, pero sus números han disminuido drásticamente debido a la caza furtiva y a la pérdida de su hábitat a pesar de los esfuerzos de conservación llevados a cabo por el gobierno. Se teme que el tigre del sur de China, una de las subespecies más pequeñas del mundo y la única nativa del centro y sur de China –además de ser la subespecie más amenazada–, se extinga en el mundo silvestre.
Visto en: Reuters