Austin Hay es tan sólo un estudiante de secundaria, pero ha construido algo extraordinario. Como quería su propio espacio, comenzó a trabajar en una pequeña casa. El proyecto comenzó cuando la escuela secundaria de Austin le pidió que desarrollara un proyecto de investigación sobre cualquier cosa que le apasionara. Entonces Austin decidió investigar sobre la construcción de una pequeña casa, una tendencia que había visto crecer alrededor del mundo. Después de investigar, Austin, que era entonces un estudiante de segundo año de la escuela secundaria, se inspiró para construir su propio hogar.
Sus padres y su abuelo supieron que hablaba en serio cuando él llegó a casa con un remolque, sobre el cual planeaba empezar la construcción. El remolque, que compró usado, costó unos $ 2.000 dólares. Austin utilizó el dinero que ahorró de sus dos empleos, uno de verano en un campamento y el otro en un bar de aperitivos del parque. En poco tiempo, Austin ya había construido un marco y un techo para su casa.
Austin entonces comenzó a trabajar más en el interior de la casa.
Él construyó un compartimiento para su cama, lo que le permitiría tener más espacio para todo lo demás de la casa
Luego, Austin construyó su propio closet, con suficiente espacio para guardar sus poleras, shorts, y otras cosas.
Él encontró muchas de las piezas necesarias para la casa yendo al depósito de desechos de la ciudad y escarbando entre la basura. Estas piezas incluyeron las puertas, ventanas, el piso, e incluso el lavaplatos.
La cocina fue un regalo, de “Papá noel” para Navidad. Era exactamente la cocina que Austin quería. Él cocinó huevos e incluso horneó galletas.
La pequeña casa incluye un baño completo, con agua caliente y fría para la ducha…
Y un retrete de compostaje.
Para el área del living, Asutin construyó un sillón. Es de madera con un cojín de espuma. ¡Este sillón también se puede convertir en una cama extra para los invitados!
Austin terminó de construir la casa en su último año de escuela. Para celebrar, invitó a sus amigos y familiares, así como también a todos los interesados, para ayudarlos a aprender cómo construir su propia casa.
En total, la pequeña casa de Austin llevó años en construirse y costó unos $12.000 dólares. Parte del dinero se reunió por medio de donaciones. Austin está muy feliz con el resultado. La casa se encuentra en el jardín de sus padres, pero Austin le colocó ruedas por una razón. Le gustaría llevarla a donde sea que termine estudiando. Incluso, más a futuro, tiene planes para vivir en ella después de que se gradúe de la universidad.
httpv://youtu.be/gMRJ9lwzCaM
Visto en: SFG