No muchos conocen esta pequeña isla en las Bahamas. Al igual que muchas otras playas paradisíacas, tiene las infaltables palmeras, agua cristalina, arena blanca y está prácticamente desierta. En ella no viven humanos solo unos cuantos gatos, cabras y otros animales. Aunque dentro del selecto grupo de habitantes en la isla destaca una extravagante especie sobre las demás: Los cerdos nadadores.
De hecho esta pequeña isla es conocida como la Isla de los Cerdos. Está gobernada por alrededor de 20 chanchos nadadores que, según cuenta la leyenda y las diversas teorías sobre ella, “habrían sido abandonados en la bahía Big Major por un grupo de marineros que querían volver por ellos para cocinarlos. Pero los marineros nunca regresaron y los cerdos sobrevivieron por el exceso de desechos de comida arrojados por los barcos que pasaban por esas aguas”.
Otra leyenda señala que los cerdos sobrevivieron el hundimiento de un barco y se las arreglaron para nadar hasta la costa. Mientras que otros dicen que los cerdos se escaparon de un islote cercano. También hay quienes sugieren que los chanchos eran parte de una estrategia de negocios para atraer turistas a las Bahamas.
Sea cual sea la verdadera razón por la que estos cerdos están en la isla, lo cierto es que efectivamente atraen a diversos turistas. Eric Cheng, un fotógrafo que fue al lugar, cuenta que “como los locales traen comida, los cerdos corren al agua y nadan hasta los botes que pasan por el lugar como si estuvieran saludándolos y dándoles la bienvenida a cada uno de ellos. Ya es raro ver cerdos en playas tropicales con arena blanca, pero verlos correr hacia el agua y nadar hasta los botes es simplemente bizarro”.
Tan rara es la situación que incluso Jennifer R., una escritora, decidió hacer un libro infantil basado en los cerdos nadadores llamado “El secreto de la Isla de los Cerdos”, que contiene imágenes del fotógrafo Jim Abernethy.