Ya han encontrado la razón por la que estas personas se están quedando dormidas en cualquier parte e incluso por 6 días seguidos.
Desde 2013 un extraño fenómeno ha azotado a la población de Kalachi, un pequeño pueblo en Kazajistán. Las personas se quedan dormidas incluso mientras caminan, están en la escuela o manejan y hay ocasiones en las que incluso duermen por seis días seguidos y cuando despiertan no saben qué ocurrió, están aturdidos, fatigados y muchas veces tienen fuertes dolores de cabeza. Desde que comenzó esta extraña “ola de sueño” ha habido 140 casos reportados de las 810 personas que habitan en la zona.
Suena como una extraña enfermedad digna de aparecer en una película de Hollywood, que ni especialistas en el trastorno del sueño y una serie de investigadores que han visitado el pueblo han logrado descifrar en estos últimos 2 años. Sin embargo, tras teorías y especulaciones de una posible psicosis masiva, causas sobrenaturales y toxinas, recientemente el gobierno kazajo anunció que el verdadero culpable de esta “enfermedad del sueño” eran en realidad unas minas de uranio que se encuentran cerca del pueblo. Las minas, aparentemente habrían sido cerradas tras la caída de la URSS y se cree que desde entonces han aumentado los niveles de monóxido de carbono e hidrocarburos en el aire. “Las minas de uranio fueron cerradas en algún punto y en ocasiones ocurre una concentración de monóxido de carbono en el lugar”, señaló el Primer Viceministro, Berdibek Saparbaev. Por esta razón, “el oxígeno en el aire se reduce y esta es la verdadera razón de la enfermedad del sueño en estos pueblos”, añadió.
Sin embargo esta explicación pareciera no convencer a todos los científicos. Claude Piantadosi, neumólogo del Centro Médico de la Universidad de Duke, ha dicho que mientras los síntomas sí podrían explicarse con esta respuesta del gobierno, no responden específicamente a este tipo de situaciones y ese es el problema. Según Piantadosi, mientras el monóxido de carbono sí puede dejar a las personas inconscientes, esto es un subproducto de la combustión, así que el neumólogo se pregunta: ¿Por qué una mina de uranio inactiva habría de estar expulsando monóxido de carbono? A esto se suma que las autoridades ya habían hecho pruebas de monóxido de carbono en el área y pese a haber encontrado altos niveles de este gas y de radón, las habían descartado como causales de la ola de trastornos de sueño. Mientras tanto, el gobierno ya ha comenzado la evacuación de los habitantes del pueblo, pero muchos se niega a dejar sus casas.