Cuando esta pareja se encontró con un montículo en medio del camino les pareció extraño. Sobre todo porque podían ver que se movía. Pero fue sólo una vez que se acercaron que descubrieron que en realidad se trataba de un pequeño suslik (que es como la versión rusa del perro de la pradera) retorciéndose en medio del camino. Estaban obviamente bastante asombrados. El pequeño animal no podía salir del agujero porque era demasiado pequeño para él y sin darse cuenta se había convertido en el blanco perfecto en medio del camino de tierra.
Es posible que el pequeño roedor hubiese engordado un poco y ahora le costara pasar por los túneles que llevaban a su madriguera, aunque también es probable que la entrada a sus túneles se hubiese hecho más pequeña por las ruedas de los autos que pasan por ahí. La pareja tomó una toalla e intentó sacar al pequeño de su agujero. El suslik se mostró incómodo al ser tocado por un humano y lo hizo evidente. Sin embargo, una vez que lograron sacarlo, corrió feliz hacia los matorrales, aliviado de haber sido liberado.
Jennifer Verdolin, científica y especialista en comportamiento animal, comentó que “si la pareja no hubiese intervenido, el animal hubiese muerto a manos de depredadores o debido a la exposición (es decir, al calor, dependiendo de la temperatura del lugar).
Mira el video completo del rescate más abajo:
Visto en: The Dodo