El secreto de nuestro destino podría estar en el fondo de nuestros océanos según estos investigadores

Un grupo de científicos está realizando estudios en el fondo del océano y excavando en las antiguas civilizaciones que se encuentran sumergidas, para buscar pistas acerca de nuestro destino.

En tiempos donde los niveles del mar se encuentran en su máximo punto de los últimos 6.000 años,  unos arqueólogos están investigando las ruinas sumergidas de antiguos asentamientos humanos para ver qué podría ocurrir en el futuro de nuestra sociedad –al descubrir lo que les ocurrió a ellos–. Antiguamente la mayor causa del cambio en los niveles del océano durante la era del hielo se debieron al intercambio entre el agua de los hielos y el agua del océano y es entonces que el planeta respondió a la dinámica de este cambio de superficie.

Es por esto que los científicos están investigando las ruinas de las civilizaciones anteriores que se encuentran bajo el agua, para ver si podrían repetirse los mismos patrones que ocurrieron antiguamente, en tiempos futuros.

El emergente campo de la investigación de las plataformas continentales prehistóricas, aumentó con el desarrollo de la tecnología de la exploración del océano y combina arqueología, ciencias de la tierra y la oceanografía para descubrir y analizar esas comunidades ahora bajo el agua. Gran parte de la actividad se centra en Europa, donde se han localizado unos 2.500 sitios y la mayoría de ellos no han sido mapeados ni excavados, según un nuevo informe de la Junta Marina Europea.

Si nos remontamos 100.000 años, el cambio del nivel del mar era de aproximadamente un metro en 100 años“, señaló Nicholas Flemming, un arqueólogo marino de la Universidad de Southampton y autor principal del informe. Y agrega que si incluso si hoy nos comparamos con el recuerdo de nuestros abuelos sobre dónde comenzaba antes la costa, ya habría diferencias.

Hace 5000 años los asentamientos humanos se alejaban de la costa en la medida que crecían y el mar subía. “Se puede ver  cómo, en la medida que el nivel del mar,  fueron abandonadas aldeas y la gente construyó una milla más lejos de la orilla“, dijo Flemming. “En el sur del Báltico, se ve que claramente y también en la costa de Israel”.

Pero si lo pensamos, hoy nuestras civilizaciones difícilmente podrían ser transportadas a otros lugares más distanciados del mar. Ante este escenario, Flemming tiene una visión preocupante: “(Las antiguas civilizaciones) perdieron un poco de bancos de tierra de caza o de pesca, pero si  (nosotros) vemos un aumento de metros del mar, se perderían las casas del Parlamento y la mitad de Tokio. Un aumento de un metro para nosotros significa muchísimo“.