Por Romina Bevilacqua
12 mayo, 2015

Los niveles de dióxido de carbono en la Tierra marcaron otro vergonzoso hito en nuestra historia. 

A tres meses de comenzar el año, ya habíamos alcanzado un récord de emisiones de dióxido de carbono. En marzo por primera vez en la historia desde que comenzaron a medir estas concentraciones en la atmósfera, el promedio mensual de la concentración global de este gas de invernadero sobrepasó las 400ppm, según los resultados publicados por la Administración Oceánica y Atmosférica Nacional de EE.UU (NOAA, por sus siglas en inglés).

“Era sólo cuestión de tiempo para que alcanzáramos las 400 ppm a nivel mundial”, señaló Pieter Tans, principal científico de la Red de Referencia  Global de Gases de Invernadero del NOAA. Pero esta no es la primera vez que el umbral de los 400ppm causa conmoción. La primera alerta que se dio en el mundo porque en ciertas zonas se cruzó ese límite fue en 2012, cuando 4 medidores en el Ártico alcanzaron niveles de 400ppm en la primavera de 2012. En 2013 en el laboratorio de Mauna Loa se midió por primera vez una concentración que cruzó la frontera de los 400 ppm de CO2. “Pero alcanzar los 400ppm como un promedio global es una piedra significativa en nuestra historia“, señala al respecto Tans. 

co2

Esta vez el récord de los 400ppm se extiende más allá de Mauna Loa, donde se encontraba la antigua medición más alta de dióxido de carbono hasta ahora, e incluye las mediciones de otros 39 sitios alrededor del mundo. Esto marca una problemática donde el aumento de gases de invernadero no pareciera tener la intención de disminuir su paso, sobre todo después de que sobrepasáramos el límite de 350ppm considerado “seguro” hace casi 3 décadas. Según los resultados de la investigación, se estima que desde la sociedad preindustrial las emisiones de CO2, una de las principales causas del calentamiento global, han aumentado considerablemente –alrededor de 120ppm– y la temperatura global ha aumentado en 1.6ºF (-16.8ºC).
Este récord mundial se espera que continúe durante mayo, hasta que las plantas del hemisferio norte comiencen a absorber CO2 del aire.

Te puede interesar