Es impresionante lo que se puede lograr con pequeñas cosas.
Ebony y Ivory, dos cabras bebé, fueron encontradas en un callejón de Australia, cuando un hombre que pasaba por el lugar las escuchó llorar. Habían sido abandonadas a su suerte y no les estaba saliendo muy bien, ya que habían sido atacadas aparentemente por un zorro o un pájaro, y ambas se veían hambrientas y sangraban. El caminante y héroe de esta historia, las llevó a su casa, las alimentó y les puso unos tiernos suéteres color azul que las transformaron de inmediato en una de las cosas más tiernas de este mundo.
Luego las llevó al santuario de animales Edgar’s Mission, donde les dieron comida y atención médica. Y por impresionante que parezca, para esa misma noche ya se veían totalmente recuperadas y felices en su nuevo hogar.
Estas son las fotos del santuario que demuestran el cambio radical que tuvieron estas pequeñas gracias al cuidado humano.
Visto en The Dodo