Por Romina Bevilacqua
24 junio, 2015

Puede que parezca un tierno animalito, pero cuando se trata de defender a su familia esta coneja sacará sus garras.

No te voy a mentir. Esta historia no termina con un final muy feliz, pero sí nos enseña bastante acerca del fuerte instinto maternal y valentía de un animalito al que siempre hemos considerado inofensivo. Cuando una madre conejo regresó al sitio donde había dejado a sus pequeñas crías, se encontró con la peor pesadilla que podría haber imaginado. Una víbora ratonera estaba ahí sofocando a una de sus tres crías, junto al cuerpo inerte de dos de ellas. Al ver esta escena, ella no vaciló ningún segundo y decidió atacar a la serpiente. Justo en ese minuto, una de las crías que aún estaba viva logró escapar, por lo que la madre siguió batallando con la víbora. De repente, la coneja hace una pausa para acercarse a sus bebés, y cuando nota que ya no tienen vida vuelve con aún más fuerza a luchar contra la asesina de sus crías. Este video demuestra a lo que una madre está dispuesta a llegar para proteger a sus pequeños, incluso aunque eso signifique poner en riesgo su propia vida al luchar con una serpiente:

httpv://youtu.be/8MHUlVIJy94

La determinada madre no se rindió hasta espantar a la serpiente. La mordió, pateó y zamarreó hasta alejarla del lugar en el que yacían los cuerpos de sus pequeños que no lograron escapar al ataque del reptil. Incluso cuando la serpiente está tratando de escapar y subir por la pared, la madre conejo se lo impide y vuelve a morderla. Según un experto en serpientes llamado David A. Steen, esta serpiente no es venenosa, por lo que es muy probable que la madre y su cría sobreviviente hayan escapado sin problemas. Es cierto que las serpientes también necesitan alimentarse, pero ver el instinto maternal de una coneja de esta forma simplemente nos enseña mucho acerca de lo que los animales son capaces de hacer por los suyos.