Si te quieres alejar de todo quizás te gustaría visitar las Islas Feroe, donde la naturaleza silvestre y bella está por todas partes y donde otros turistas son difíciles de encontrar. Las Islas Faroe son un pequeño archipiélago cerca de Escocia, Islandia y Noruega que tiene cerca de 100 pueblos y villas en sus 18 islas (una isla está inhabitada).
Con una población de más de 48.000 personas, las islas también son el hogar de 70.000 ovejas, por lo que es bastante congestionado en las laderas de los cerros.
Las islas están llenas de entretención mítica –dice la leyenda que sus columnas de roca fueron creadas cuando dos gigantes intentaron arrastrar las islas hacia su propia isla (Aka Iceland)–. Y la capital, Tórshavn, fue llamada así por Thor, el dios nórdico del trueno.
Las islas Feroe son un lugar poco recomendable para el buceo y tienen hasta 300 días de lluvia al año. Excursionismo, tours en bote y manejar alrededor de las islas son algunas de las actividades más populares, lo que hace sentido considerando el grandioso paisaje. También es entretenido ver los antiguos cobertizos vikingos construidos por los vikingos noruegos, quienes fueron de los primeros en establecerse en la isla.
Y lo mejor es que es relativamente fácil llegar a ellas. La ciudad puerto de Klaksvik es una parada favorita de los cruceros y siempre hay vuelos y ferris que van a las islas. ¿Nos vemos allá?
Visto en: HuffPost
