Es 82 veces más cazado que los rinocerontes y por impactante que suene, 1.000 veces más que los tigres, pero ¿tienes alguna idea de a cuál me refiero?
Se llama pangolín. Imagínate a un armadillo vestido como alcachofa. Pero extrañamente, no son parientes cercanos. El parecido entre el pangolín y el armadillo es un excelente ejemplo de evolución convergente, en la cual dos especies evolucionan de forma separada pero resultando en un parecido funcional debido a que deben adaptarse a ambientes similares. En este caso, eso significa excavar madrigueras y alimentarse de hormigas y termitas. El parecido a una alcachofa probablemente sea una mera coincidencia.
A pesar de estas similitudes, el pangolín es sorprendentemente único. Pertenece a una distintiva estirpe de mamíferos que datan desde los tiempos en los que los dinosaurios habitaban la Tierra, alrededor de unos 80 millones de años atrás (las estirpes humanas datan de menos de un décimo de ese tiempo). Además, es el único mamífero en la Tierra que está cubierto en escamas. Estas le otorgan una forma muy efectiva de protección contra sus predadores naturales. Cuando es atacado, el pangolín se enrolla hasta convertirse en una bola y las afiladas escamas forman una armadura prácticamente impenetrable. Una segunda defensa que posee es el emitir un ácido nocivo que muy difícilmente competirá por el título de Mejor Olor del Mundo.
El pangolín es tan especial que los taxonomistas les han dado su propia orden: Pholidota, de la cual se encuentran cuatro especies en África y cuatro en Asia. Son animales nocturnos, solitarios y tímidos. Poseen una lengua más larga que su cuerpo. Algunas especies son capaces de colgarse de sus colas mientras que otras pueden excavar madrigueras lo suficientemente grandes para que tú puedas estar de pie dentro de ellas. Este especial animal también tiene una manera adorable de criar a sus pangocachorros (pangopups). Sí, realmente se llaman pangocachorros. Los pangocachorros son acarreados sobre la cola de su madre durante los primeros tres meses de vida. Después de eso se bajan de su cola y comienzan a caminar. Se quedan junto a su progenitora por otros dos años hasta llegar a la adultez, momento en el cual ya son lo suficientemente fuertes y experimentados como para comenzar sus propias vidas solitarias.
El drama del pangolín
Desafortunadamente, el armadillo y el pangolín están a años luz en el nivel de atención que reciben: Mientras uno es celebrado como mascota oficial en la versión brasileña de la Copa Mundial de Futbol, el otro es silenciosamente servido como comida hasta estar en peligro de extinción.
Un impresionante número de 100.000 pangolines son cazados cada año. Como resultado de esto, las ocho especies de pangolines están en peligro de extinción, y recientemente la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza marcó dos especies asiáticas como en peligro crítico de extinción. A pesar de esto, su comercio ilegal va en alza. En un caso particularmente desolador, 42 pangolines fueron rescatados de cazadores en Vietnam y entregados a guardabosques, pero en vez de regresarlos a su hábitat natural, estos los vendieron a restaurantes por más de 11.000 dólares. Si bien el dinero fue confiscado, los guardabosques nunca fueron aprisionados por sus crímenes como sucede a menudo en los casos de comercialización de esta especie.
Su costosa carne (un kilo de esta puede costar hasta 250 dólares) es una delicadeza y un símbolo de estatus en China y Vietnam. Se hace una sopa de fetos, los cuales son considerados un elixir para todo tipo de situaciones: desde hombres preocupados por su virilidad hasta madres primerizas que quieren amamantar. Sus escamas son también muy solicitadas en la medicina tradicional, la cual afirman (sin evidencias) que puede curar todo tipo de males, desde el acné hasta el cáncer, a pesar del hecho de que están hechos principalmente de queratina, la cual es la misma proteína, químicamente idéntica, que se encuentra en nuestras uñas, en los cuernos de rinocerontes y en las garras de los pájaros.
En conclusión: Lo que los hace ser únicos (el hecho de ser el único mamífero con escamas) puede ser su mayor peligro. En algunas partes de China se cree que el pangolín posee un valor medicinal y sin el respaldo de ningún tipo de evidencia científica. Se origina en una creencia ancestral sobre la capacidad que tienen los pangolines para excavar. Su nombre en chino significa, literalmente, “animal que puede excavar montañas”, lo cual no parece ser una exageración debido a que se ha reportado que incluso excavan a través del concreto. Sin embargo, este mito ancestral va incluso más allá y sugiere que el alimentarse de esta criatura debería darle a las personas la capacidad de absorber la fuerza del pangolín para romper varias barreras biológicas. Sobra decir que, tal como con los cuernos de rinocerontes y partes de tigres, no hay evidencia científica que demuestre que los pangolines entreguen algún beneficio médico.
¿Qué podemos hacer?
El proteger al pangolín de una forma exitosa requerirá de un enfoque multi-estratégico. Quizás lo más crucial es encontrar formas de reducir la demanda de escamas y su carne. El interés por estos productos de vida silvestre se ha reducido con éxito en el pasado, y el observar esos casos puede ayudarnos a encontrar soluciones creativas para ayudar al pangolín. Por ejemplo, a pesar de que la sopa de aleta de tiburón sigue siendo un gran problema, la demanda de esta en China ha disminuido en un 70%. Esto se debe en gran parte a una campaña de gran escala de concientización sobre el impacto de la comercialización de la aleta de tiburón. La demanda de carne de ballena también ha disminuido de forma similar gracias a décadas de campañas y prohibiciones globales.
El reducir la demanda puede ser un proceso lento, y no existe ninguna garantía de tener éxito. Por lo tanto, es esencial el abordar el problema de la comercialización del pangolín en China y Vietnam. Los guardabosques y autoridades relacionadas a la vida silvestre deben recibir los recursos y entrenamiento necesarios para combatir de forma efectiva el comercio de la vida silvestre. También deben ser implementadas regulaciones y castigos más estrictos.
Poco se conoce acerca de la actual distribución, historia de vida o tamaño de población de las ocho especies de pangolín. Esto se debe en parte a que es un animal reservado, solitario y nocturno, y en parte a que hasta hace poco no se habían otorgado fondos para su estudio. Así, y gracias a unos investigadores muy dedicados, el año pasado, por primera vez, el nuevo Grupo Especialista de Pangolines puso en marcha un plan de acción internacional para proteger a la especie, su hábitat y llevar a cabo esfuerzos de rescate.
Más que nada, necesitamos más personas que amen al pangolín. Se necesita desesperadamente más apoyo público y voluntad política para lograr un cambio de actitud, crear consciencia y aumentar los fondos para su conservación. Debemos aumentar la atención que esta pequeña especie de mamíferos en peligro recibe hoy. Honestamente, incluso el diccionario de Gooogle Chrome sugiere que la palabra “pangolín” es un error y que quizás lo que querías decir era “paneles”.
Con una mayor atención y esfuerzos de conservación, quizás podamos poner un fin a su comercio ilegal y alejar a esta especie única del riesgo de extinción. Si el pangolín fuese a desaparecer para siempre, sería una pérdida trágica de uno de los animales más adorables y maravillosamente adaptados del mundo.
