“Awww” es la única expresión que se me ocurre para describir a las tiernas criaturas que protagonizan este video.
En las aguas de Port Charlotte, en Florida, Estados Unidos, un pescador de 18 años llamado Calvin Conger capturó una mantarraya. Todo marchaba perfecto hasta que Calvin notó que tenía un segundo e incluso un tercer aguijón moviéndose y saliendo de ella. El padre de este joven, Terry Conger, instintivamente presionó el vientre del animal y ¡Pafff!, la sorpresa los dejó a todos con la boca abierta. En menos de un segundo la mantarraya había expulsado a su versión en miniatura. Un tierno y perfecto bebé que decidieron tirar al mar y al que siguió, otro absolutamente igual.
Un momento maravilloso y que hizo olvidar a la familia humana, del verdadero propósito que los reunía sobre ese bote. Y es por eso que Terry cortó el hilo del anzuelo que mantenía presa a la madre mantarraya, la devolvió al mar y posteriormente al segundo bebé, con la intensión de que pudiesen vivir en absoluta paz y libertad como una familia.
No te pierdas ni un segundo de este impresionante video que grabó Valerie Conger, la madre de Calvin, y que refleja a la perfección las maravillas de la naturaleza.
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PD: Este video es un hecho que podemos causar mucho daño a los animales y la naturaleza. Muchas veces sólo los vemos como carnada, y la verdad es que puedes encontrarte miles de sorpresas a su alrededor (sin dejar de considerar que tienen el mismo derecho, e incluso más que nuestra especie de vivir, ya que no son una amenaza para el planeta).
