Mientras todos están vueltos locos con el café, deberías prestar más atención al té. Así es, aquella bebida que se ha demostrado que te calma cuando quieres relajarte o te despierta cuando necesitas ayuda por la mañana. Sin ir más allá, el té es genial. Y aquí te damos al menos 10 razones por las que deberías consumirlo más seguido:
1. Primero lo primero: es mucho más fácil de preparar que el café
Para preparar un buen café, necesitas por lo menos una máquina y los granos de café. Si no tienes la máquina, necesitas un moledor de granos, la cafetera y agua hervida. Para preparar un buen té sólo necesitas un infusor –o tetera–, té en hoja y agua hervida. Es así de simple.
2. El té tiene múltiples beneficios para tu salud
Cada vez aparecen más estudios que confirman los diversos beneficios del té para la salud. Algunos de ellos han demostrado que los consumidores regulares de té verde y té negro tienen menos probabilidades de sufrir enfermedades cardíacas y que los antioxidantes en el té verde, negro y oolong pueden ayudar a bloquear la oxidación del LDL (colesterol malo), aumentar el HDL (colesterol bueno) y mejorar la función de las arterias. Además se ha demostrado que el consumo habitual de té tiene un efecto protector en las personas sobre la posibilidad de sufrir hipertensión.
Sin embargo siempre se destacan las propiedades del té verde sobre los demás, sobre todo porque es el que tiene mayor concentración de catequina (antioxidantes) que combaten e incluso pueden prevenir el daño a las células y podrían jugar un rol clave en la prevención de diversos cánceres incluyendo a la piel, mama, pulmón y colon. Además se ha demostrado que ayuda a mantener los niveles de azúcar estables. Otras de sus bondades son: protección ante la pérdida de células cerebrales, infecciones virales y de bacteria, alergias, artritis y problemas cardíacos.
3. Además el té verde mantiene tus huesos saludables
Si los beneficios anteriores no ayudaron a convencerte de las bondades del té verde, aquí hay otra: ayuda a tus huesos a estar más fuertes. Un estudio realizado a un extenso grupo de adultos mayores sobre la osteoporosis demostró que el consumo de té verde tiene un pronunciado efecto en la salud de los huesos ya que ayuda a preservarlos de mejor manera –manteniendo una mayor masa ósea–. Además beber té verde puede ayudar a disminuir el riesgo de tener fracturas óseas causadas por la osteoporosis.
4. Beber té negro sin endulzante puede ayudar a solucionar tu problema con el mal aliento
Si tienes halitosis, deberías comenzar a considerar la idea de beber té negro. Investigadores de la Universidad de Illinois en Chicago, específicamente de la escuela de Odontología, descubrieron que el té negro contiene componentes químicos, llamados polifenoles, que frenan la formación de la bacteria causante de la placa bacteriana. Los polifenoles también disminuyen los “niveles de producción de ácido”, lo que ayudaría a prevenir las enfermedades periodontales. (En otro estudio realizado por la Universidad de Pace, se mezcló el té verde con diversas bacterias, incluyendo las que causan la faringitis estreptocócica y la caries dentales y se descubrió que el té era muy efectivo para combatir esta bacteria, porque inhibe su crecimiento).
5. En China se le considera una “necesidad de vida”. Quizás tú también deberías considerarlo así
La cultura china tiene un proverbio creado por el pueblo Sung llamado “las siete necesidades de la vida”, estas son “Leña, arroz, aceite, salsas, sal, vinagre y té“.
El fuego para preparar la comida, el arroz como el alimento principal, la sal, aceite, salsa y vinagre como aderezos esenciales para preparar la comida. Y finalmente el té, una popular bebida en China, utilizada por sus propiedades medicinales.
6. El té tiene la capacidad de calmarte
Ciertas investigaciones han sugerido que el té de valeriana puede funcionar como un catalizador seguro y efectivo del sueño. En un estudio alemán, 202 adultos tomaron o extracto de valeriana o un medicamento para la ansiedad que se obtiene sólo con receta médica. Las personas que tomaron el extracto de valeriana dijeron haber “obtenido la misma mejoría en la calidad del sueño, se sintieron descansados y durmieron la misma cantidad de horas que aquellos que tomaron el medicamento mediante receta médica”. Además el té negro te ayuda a calmar el estrés.
7. Es casi una orden presidencial
Si el presidente de Estados Unidos está obsesionado con el té ¿Por qué no deberíamos obsesionarnos con esta bebida también? Un artículo del 2009 del New York Times, que describía los cambios que Obama había hecho a la Casa Blanca, informó que las despensas estaban llenas de su marca favorita de té orgánico: Honest Tea. Aparentemente, sus sabores favoritos son “Black Forest Berry” y “Green Dragon”. Si no te gusta la idea de seguir las reglas del presidente estadounidense ¿Podrías al menos seguir al resto del mundo? Esto, porque el té es la segunda bebida más consumida en el mundo, después del agua.
8. Puede aliviar tu problema de alergias estacionales antes de que las tengas
Si sufres de alergia estacional, deberías comenzar tu día con una taza de té de ortigas. Aun cuando falta mucho por investigar, un estudio preliminar hizo un seguimiento a 69 personas y descubrió que las hojas de ortiga congeladas y secadas pueden “mejorar levemente los síntomas de alergia”.
9. Algunos expertos creen que tomar té puede ser muchas veces mejor que tomar agua
Investigadores de la Revista Europea de Nutrición Clínica descubrieron que el té te rehidrata de la misma manera que el agua, reemplazando los fluidos de tu cuerpo. Dado que el té posee antioxidantes, existe un bono agregado. “El agua esencialmente reemplaza los fluidos. El té reemplaza los fluidos y además contiene antioxidantes por lo que posee dos características para quien lo toma”, dijo la Dra. Carrie Ruxton, nutricionista de salud pública, en una entrevista con la BBC.
10. Amamos el té de la tarde ¿Necesitamos decir algo más?
Existen fiestas donde se bebe exclusivamente té. En estas fiestas también hay deliciosos sándwiches. Te vamos a contar una pequeña historia: en 1840 a Anna Maria Stanhope, le séptima duquesa de Bedford, se le ocurrió la brillante idea de comenzar a beber té en las tardes para “acortar el tiempo que pasa entre el almuerzo y la cena”. Para poder tener un buen (pero restringido) apetito que permitiera comer los dulcecitos con los que se acompaña tal evento, los sándwiches que se comían en este evento tenían que lograr satisfacer al estómago, pero no tanto. De esta manera, surgieron los sándwiches en miniatura sin borde (también conocidos como canapé), cuyos rellenos eran más livianos para el estómago, como pepino y huevos, para así comer un snack delicioso y rápido.