10 Increíbles actos de resistencia que marcaron la historia.

Quien podría olvidar al hombre del tanque, ¿ese hombre desconocido que se paró en frente de todos los tanques en la Plaza de Tiananmen? Tan épico como fue este acto de resistencia, hay otros ejemplos clásicos que han girado cerca del mismo material de la historia del hombre del tanque. Los increíbles actos de resistencia listados aquí son leyendas verdaderas y, por esto, merecen su lugar correcto en la historia.

 

El Hombre Que Se Negó A Hacer el Saludo Nazi

 

Este increíble, no muy sutil acto de resistencia debió haber sido mencionado en nuestra lista pasada de personas que no se aguantaban a Hitler. Una foto tomada en 1936 conmemorando el almuerzo de un nuevo barco de entrenamiento en Hamburgo mostró como un hombre llamado August Landmesser se negó a hacer el saludo Nazi junto con sus compañeros. De lo contrario, simplemente cruzó sus brazos y miró el nuevo barco algo engreído.

La resistencia de Landmesser venía de un amor prohibido. El partido Nazi lo expulsó de su sitio después de descubrir que había seguido viviendo con su esposa judía, una mujer llamada Erma Eckler. Eventualmente, los Nazis serpararon a los esposos forzosamente para siempre. Le aplicaron la eutanasia a Eckler en 1942 y le dieron a Landmesser una sentencia de muerte virtual reclutándolo para una batalla penal en 1944. Afortunadamente, las hijas de la pareja sobrevivieron a la guerra y desde ahí su misión se volvió regar la historia del fuerte hombre que se atrevió a enfrentarse a los Nazis.

 

Todo Lo Que Hizo Emil Kapaun En La Guerra de Corea

 

El sacerdote católico y ganador de la Medalla de Honor después de morir, Emil Kapaun estaba siguiendo con cuidado las huellas de su antecesor, Maximilian Kolbe. Como un capellán durante la Guerra de Corea, Kapaun protagonizó muchos actos desalmados de heroísmo. El se ofrecía a los heridos, los sacaba del campo de batalla, y les brindaba la última ceremonia hasta que morían. Aun así, fue solo hasta su captura en noviembre de 1950 por la fuerza China que Kapaun en realidad brilló. Después de ver un soldado chino a punto de ejecutar rápidamente a una mujer soldado herida llamada Herbert Miller, Kapaun tranquilamente entró en la escena, puso al soldado a un lado, y cargó a Miller en su espalda. Milagrosamente, el soldado chino perplejo no disparó.

Dentro del campo de prisión de guerra, Kapaun se convirtió en el ejemplo de esperanza para los otros prisioneros. Aparte de bañar y alimentar a los más débiles, también robaba comida frecuentemente y otras necesidades de los chinos, arriesgando su propia vida en el proceso. Resistió intentos de adoctrinamiento, y hasta se enfrentó los protocolos comunistas haciendo servicio católico justo dentro del campo. En ese momento, los carceleros habían sido cautelosos con él, hasta estaban asustados de que matarlo desencadenara una huelga. Tristemente, las condiciones del campo gradualmente hicieron su labor en la salud de Kapaun; murió cuatro meses después de haber sido encarcelado y fue enterrado luego en una tumba sin marcar. Aun así, antes de morir, le dio a sus compañeros de prisión el regalo más preciado de todos: las ganas de vivir.

 

 La Carta De Juramento De Los Cosacos Para El  Sultan Otomano

 

Generalmente hablando, probablemente no fue una buena idea ponerse del lado malo de Sultan Mehmed IV, considerando que el Imperio Otomano estaba prácticamente acabando con cada indicio de oposición que viera en el camino en ese momento. Aun así, el Zaporozhian Cossacks de Ucrania no le podía dar menos importancia – ellos eran los Cossacks, después de todo. Despues de que una batalla inició en 1675 que a sus fuerzas vencidas por los Cossacks, Mehmed IV les mandó una carta de amenaza ordenándoles a rendirse. En lugar de seguir sus órdenes, los Cossacks respondieron con una de las cartas más ofensivas que jamás se haya escrito. Aparte de los numerosos juramentos, la letra también ponía en burla la carta de Sultan línea tras línea y terminaba con una ocurrencia perfecta de Hollywood. Este incidente sería luego interpretado en una pintura del artista Ruso Ilya Repin. Aunque ningún historiador a personificado la reacción de Mehmed IV a la respuesta, podemos asumir seguramente que no fue para nada buena.

 

Jacques de Molay Retractó Su Confesión En Frente De Todo El Mundo

 

Phillip The Fair puede ser uno de los villanos mas subestimados de la historia. Debajo de su disimulo por eliminar a los herejes (y convenientemente enriqueciéndose en el proceso), Phillip tuvo a los Caballeros Templarios arrestados en octubre de 1307. Con el respaldo oficial del Papa Clemente V, Philip hizo que torturaran a los miembros hasta que admitieran que no existían pecados y las ubicaciones de sus amplias riquezas.

En medio de esta tragedia estaba El Gran Maestro Templario Jacques De Molay. Un poco viejo y siete años de tortura inexplicable lo habían forzado a confesar. En un intento por humillarlo más tarde, una comisión en 1314 decidió tenerlo a él y a otros tres líderes Templarios para que repitieran sus confesiones en una plataforma puesta en frente de la Catedral de Notre Dame en Paris. Lo que seguía sería una de las retractadas más famosas de la historia: en lugar de leer su guión, De Molay proclamó la inocencia de los Templarios y condenó al rey francés y al papa por su traición. Uno de sus colegas, Geoffoi de Charney, también se retractó de hacer su confesión. El incidente enfureció a Philip tanto que hizo que quemaran a los dos hombres el mismo día. De Molay, al parecer, fue el último en reír: antes de su muerte, supuestamente le hizo un hechizo al rey y al papa para que lo acompañaran en la ultratumba en poco tiempo – y así fue.

Tripulación Estadounidense Capturada Que Vencieron A Sus Captores Norcoreanos 

Si eres un enemigo capturado por los Norcoreanos, lo más probable es que vas a ser maltratado. Esto es exactamente lo que paso en enero de 1968 cuando los Norcoreanos capturaron al USS Pueblo y encarcelaron a los hombres de su tripulación por casi un año. Durante el cautiverio, los hombres tuvieron que vivir condiciones de vida inhumanas junto con tortura y adoctrinamiento forzado. También se volvieron herramienta de propagando sin querer y regularmente aparecían en fotos como prueba de la superioridad y bondad de Corea del Norte.

Afortunadamente, los hombres descubrieron una manera clave de debilitar toda esa propaganda. Al darse cuenta que los Norcoreanos no conocían el significado del dedo de la mitad, los hombres empezaron a mostrar este gesto en la toma de fotos, diciéndole a sus carceleros que este era solo un signo de buena suerte con orígenes Hawaianos. Esto fue así por un tiempo; después de que los Norcoreanos se dieron cuenta, golpearon a los hombres cruelmente por una semana entera. Seguido de la liberación de estos hombres, Estados Unidos hizo su propia versión de venganza a los Norcoreanos retractándose de una disculpa anterior.

 

La Mujer Que Quito La Bayoneta

 

Mientras somos más cercanos al famoso incidente que incluyó a la activista de los derechos civiles Rosa Parks rehusándose a quitarse de su puesto en un bus segregado, sería una pena si no mencionamos el acto similar de resistencia de Gloria Richardson. Como una líder del movimiento de los derechos civiles en Cambridge, Maryland en 1960, Richardson trabajaba muy duro para acabar con la segregación y la desigualdad de trato por parte del gobierno de los negros. En este tiempo, también se tenían que defender a ellos mismos activamente de los ataques de la supremacía blanca y de quienes estaban a favor de la segregación.

En 1963, la tensión racial culminó en una gran huelga, forzando al gobernador a declarar la ley militar y mandar a la Guardia Nacional. Este horrible episodio sería el mejor momento para Richardson: en vez de retractarse por ver a un Guarda apuntar con una bayoneta en su cara, la soltera, y joven madre de dos furiosa la quitó de su frente y gritó insultos al señor. Aunque Richardson se seguiría uniendo continuamente a otras protestas, nunca olvidó este momento de desgracia en sus últimos años, aun diciendo que estaba loca al haber hecho esto.

 

El Gesto De Kozakiewicz

httpv://youtu.be/Mn0in1fzqoI

Los olímpicos están usualmente llenos de momentos que siempre estarán presentes en la memoria de los hombres; este es un gran momento. Durante los Juegos Olímpicos de 1980 en Moscú, el incidente que incluyó al polaco deportista olímpico de salto Wladyslaw Kozakiewicz diciéndole más que todo a las personas de la Unión Soviética la versión de su país del dedo de la mitad después de ganarse la medalla de oro. Antes de esto, el público se lo había estado burlando con el propósito de hacerlo caer. Su acto de resistencia lo hizo una celebridad en su país natal – y en todo el mundo.

Naturalmente, el pequeño incidente no estuvo bien para los soviéticos. Su misión en Polonia era que los oficiales Olímpicos le quitaran al deportista su medalla de oro. Su solicitud no fue satisfecha después de que los oficiales Polacos estuvieron a la defensa de Kozakiewicz y explicaron que el gesto había sido el resultado de un “espasmo involuntario en un músculo.”

 

Napoleón Retó A Sus Soldados A Dispararle

 

Aparentemente ser el gobernador de una pequeña isla no era del gusto de Napoleón; después de todo, en algún momento el manejó casi todo el continente europeo. En un intento de volver a ganar su poder perdido, Napoleón y algunos de sus más fieles soldados se ingeniaron un atrevido escape de su prisión en la isla de Elba en febrero de 1815. Durante su camino a Paris, muchos de sus principales soldados se mantuvieron a su lado. En un evento extraordinario que exhibió el carisma de Napoleón, él por su cuenta convenció a un régimen entero de reunirse a su causa. El quinto reglamento había sido asignado para parar la marcha de Napoleón en Grenoble y estaban preparándose para dispararle a su grupo mucho más pequeño. En lugar de retirarse, Napoleón tranquilamente solo hasta el frente de las líneas, mostrando su pecho, y dijo:

 

“Si hay alguien entre ustedes que mataría a su Emperador, déjenlo hacerlo. Aquí estoy.”

 

Después de oir estas palabras, los soldados gritaron “Que viva el Emperador” y animaron a Napoleón. Solo unos cuantos días después, Napoleón estaba al mando de Francia una vez más, aunque fue un reino que después ser acabó rápidamente.

 

La Respuesta En Una Palabra De Los Espartanos a Philip De Macedonia

 

Aparte de su legendaria destreza para pelear, los espartanos también tenían una reputación por ser personas de pocas palabras. En un incidente como este que demostró el poder de sus breves respuestas, se tuvieron que enfrentar al papá megalómano de Alejandro Magno, Philip de Macedonia. Después de que el hombre firmó control sobre toda Grecia para salvar a Esparta, le envió un mensaje a los habitantes, advirtiéndolos de que la negación de rendirse significaría su total destrucción, “entonces si traigo a mi armada a su campo, destruiré sus cultivos, mataré a su gente y derribaré su ciudad.”

Los espartanos, en una moda lacónica, respondieron con una sola palabra: “Sí.” Podemos asumir que esto fue suficiente para hacer que Philip se retractara. Para recordarlo de su reino, nunca más amenazó a Esparta. Alejandro hizo lo mismo; de hecho, los espartanos nunca se unieron a sus conquiste de Persia ni en su expedición hacia Asia.

 La Mujer Que Enfureció A El Ayatollah

Pocas personas en el mundo pueden decir que enfurecieron y también sorprendieron al temido líder Iraní Ayatollah Ruhollah Khomeini. De hecho, Oriana Fallaci puede ser la única que puede. En una entrevista sin precedentes con Ayatollah en octubre de 1979, la periodista italiana y principal peleadora de resistencia de la II Guerra Mundial repetidamente irritaba al clérigo con sus preguntas desafiantes relacionadas a sus convicciones políticas y religiosas. Hasta un punto, en el que el tema llegó a la forma de vestir de las mujeres musulmanas. Después de que Ayatollah la reprendiera y dijera que ese era el vestido apropiado para las mujeres, Fallaci se arrancó su chador en frente del clérigo. El incidente sorprendió a El Ayatollah lo suficiente para hacerlo caminar hacia afuera de la entrevista.

A Fallaci le tocó esperar un día para que el clérigo volviera; durante ese tiempo, su hijo Ahmed le advirtió que no volviera a traer el tema a colación – una orden que ella ignoró. Cuando el Ayatollah volvió, ella inmediatamente retomó el tema. En lo que puede ser descrito como un momento que solo se da una vez en la vida, el clérigo posteriormente sonrió y se río en lugar de ponerse bravo. Después de que la entrevista terminó, Ahmed alagó a Fallaci por ser la única persona en el mundo en hacer reír a su padre.