Puedes no haberte dado cuenta, pero estas pequeñas cosas te están haciendo infeliz

1-     Te preocupas.

“Soy un hombre viejo y he sabido de muchos grandes problemas, sin embargo muchos de ellos nunca ocurrieron”  – Mark Twain

Las preocupaciones  generan torbellinos internos. Son como una mecedora que se mueve alocadamente, sin ir a ninguna parte. Las preocupaciones no generan acción, sino que nos paralizan y en consecuencia no nos es posible pensar claramente y hacer cambios que nos aseguren que los resultados negativos nunca ocurran.  Tu energía sería mucho mejor utilizada si la dedicases a cambiar cosas que puedes controlar y dejar que las otras solo ocurran.  Bobby McFerrin lo dijo de manera muy simple en una de sus canciones: ¡No te preocupes! ¡Se feliz! No estar preocupado ciertamente ayuda a crear felicidad.

2-     Te aferras a la idea percibida del control.

“A medida que tu fe ser fortalece te darás cuenta que no hace falta la necesidad de tener un sentido del control, que las cosas fluirán como quieran, y que tú fluirás con ellas para tu gran deleite y  beneficio” – Emmanuel Teney

Hay algunas veces, en que la gente parece creerse salida directamente de una historieta de superhéroes. Creen que pueden controlar todo muy bien y  que las cosas saldrán exactamente como planearon. ¡Qué c arga tan pesada! Definitivamente es necesaria la fuerza de Superman para sostener todo ese peso. Sin embargo, la verdad es que no tenemos esa habilidad para controlar todo, apenas tenemos la habilidad de controlarnos a nosotros mismos.  Una vez que hayas hecho las paces con esta idea, verás que la presión desaparece y puedes comenzar a disfrutar el viaje, en vez de focalizarte en la imposibilidad de hacerlo.

3-     Te aferras a los resentimientos.

“El enojo es un ácido que puede hacer más daño al recipiente que lo aloja que sobre cualquier otra cosa sobre la que es vertido” – Mark Twain

Aferrarse al enojo tiene la misma lógica que tomar veneno y esperar que otra persona muera. Te estás dañando a ti mismo al portar toda esa energía negativa. Deja que la amargura se vaya… para tu propio beneficio. La persona  que te criticó, seguramente esta pasándola muy bien sin volver a pensar en ti, mientras que tú desperdicias tu vida enviándole energía negativa con tu mente.

4-     Crees que todos deberían guiarse por las mismas reglas que tu.

“Si esperas que el mundo sea justo contigo porque tú eres justo.  Te estás engañando. Eso es lo mismo que esperar que el león no te coma porque tú no te lo comiste”

Noticia de último momento: El mundo no se guía por el mismo libro de reglas que tú utilizas. Cuanto antes aceptes esto, más feliz serás. Nadie más recibió  tu memo de cómo se deberían hacer las cosas, cómo deberían tratarte, o cómo deberían vivir sus vidas de acuerdo a tus estándares y creencias. La gente, con frecuencia se enoja porque alguien viola tus profundamente arraigados ideales. Aún tratando de realizar una tarea imposible, creer que todos viven de acuerdo a tu concepto de perfección, está destinado a crear mucha frustración. Simplemente acepta a la gente tal cual es y aprecia el colorido espectro de ideas y puntos de vista en vez de exasperarte por ellos.

5-     Te comparas con otros.

“Decir que alguien es feo no te hace más bello.” Mucha gente juega el juego interno de la comparación. Generalmente, observan una pequeña parte de la vida de la otra persona y ven qué puntos tienen en común.  Por ejemplo, podrían comprarme con Matt Fitzgerald, campeón del Ironman y medallista olímpico y determinar que es mejor triatleta que yo.  Sin embargo, estas es una pequeña parte de la vida. ¿Quién sabe? Quizás yo pueda montar a caballo o cantar mucho mejor que él.  Enfocarse solamente en una pequeña fracción de una persona y compararla contigo es una actividad totalmente inútil. Tú eres mucho más que esa pequeña parte de tu vida que tienes bajo el microscopio en ese momento. Este hábito solamente creará descontento en tu vida. Si no puedes parar de medir, haz un viaje introspectivo. ¿Eres una mejor persona que ayer?

6-     Eliges ser feliz solamente cuanto todos tus sueños se hacen realidad

La felicidad no está determinada por lo que pasa a tu alrededor, sino por lo que pasa en tu interior.  Mucha gente depende de otros para ser felices, pero la verdad es que la felicidad siempre viene desde adentro.”

¿Quién es una persona más feliz, la que decide “Seré feliz cuando logre juntar 100 millones de dólares”, o la que cree, “Seré feliz con una maravillosa cena en compañía de mi familia?” Tener grandes metas está muy bien. Pero cuando asocias tu felicidad a futuros éxitos que quizás no ocurran, nunca te será posible disfrutar la vida que vives hoy. Encuentra cosas que te motiven hoy y deja que el mañana te sorprenda.

7-     Eres una persona que siempre ve el medio vaso vacío.

“Te conviertes en lo que te focalizas y en la gente con la que pasas tu tiempo” Si eres una persona pesimista, verás todo lo malo que hay en tu vida. Tu percepción se vuelve tu realidad. En vez de eso, elige focalizarte en lo mejor de la gente, en los momentos brillantes, y en la belleza y las bendiciones que te rodean. Cuanto más te focalices en la luz del sol, las sombras invadirán cada vez menos tu perspectiva.

8-     Eres un solitario.

“La pobreza más terrible es la soledad y el sentimiento de no ser amado” – Madre Teresa

Somos seres sociales por naturaleza y alimentar las relaciones es una gran parte de nuestra vida. Si te encuentras solo y deprimido un sábado a la noche, haz el esfuerzo de modificar eso. Encontrar amistades seguramente incrementará tu entusiasmo por lo que cada día nos brinda. ¿Cómo se encuentran buenos amigos? Busca lugares a los que concurran personas con intereses y creencias similares para construir una relación. Sonríe e interésate en forma genuina por los demás. Te sorprenderá cuán lejos te  llevará construir relaciones para toda la vida.

9-     Buscas lo material por sobre todas las otras cosas de la vida.

“Mucha gente es tan pobre porque solamente tiene dinero”. El dinero puede ser definitivamente una gran ayuda en la vida, pero no trae consigo la felicidad. Piensa en cómo te sentirías si mañana fuese el último día de tu vida. ¿Querrías realmente hacer más dinero o querrías focalizarte en conectarte con gente o tener ciertas experiencias? Si vives de acuerdo a tus valores, hallarás en ellos muchos más beneficios que lo que el materialismo te podría brindar en toda tu vida.

10-  No te haces tiempo para las cosas correctas

“Cuando dejas de perseguir las cosas incorrectas, le estás dando una chance a las cosas correctas para que te alcancen”. Todos perdemos el foco algunas veces.  Sin embargo, mantener nuestras actividades alineadas con nuestros valores es útil para mantener una perspectiva positiva. Un buen ejercicio es listar tus valores y ordenarlos de acuerdo a la importancia que tienen para ti. Luego, chequea cuantas de tus actividades diarias realmente se alinean con tus valores. ¿Hay alguna desconexión? Si la hay, ¿qué puedes hacer para que eso cambie?

11-  Pasas tu tiempo con gente infeliz.

“Cuando empiezas a comprometer tus valores y tu moral por la gente que te rodea, es probablemente tiempo de cambiar la gente que te rodea”. Eres la suma de las cinco personas con las que pasas mayor tiempo. Si tus amigos son una constante fuente de negatividad en tu vida, es tiempo entonces de encontrar gente más positiva.

12-  No has hallado todavía el propósito de tu existencia.

“Tratar de ser alguien que no eres es desperdiciar la persona que sí eres.” Demasiada gente ha suscripto a la mentirosa idea de que el propósito de la vida es llegar al fin de semana.  No hay duda de por qué hay tanta gente miserable en el mundo, que solamente espera marcar la salida. En vez de existir, ¡encuentra una manera de comenzar a vivir! Encuentra lo que te apasiona y persíguelo a pesar de que eso puede poner en evidencia tu ser mundano y aterrorizarte. Descubrir que rol juegas en la historia es una de las mejores cosas de la aventura de la vida.

13-  Eres más un actor que un autor.

“Ser tu mismo en un mundo que constantemente está tratando de hacer que seas alguien más es el mayor de los logros” – Ralph Waldo Emerson

No le prestas ningún servicio al mundo cuando tratas de ser alguien que no eres. Sé auténtico. Asumir un rol que no fue hecho para ti solamente para satisfacer las expectativas de otros causa solo dolor al corazón. Aún cuando trates de no hacerle caso al nudo en tu estómago, una parte de ti siempre sabrá que estás comprometiendo tus emociones y tu felicidad para leer las líneas que tú no escribiste y más aún, en las que no crees.

14-  Estás  atascado en tu pasado.

“No puedes comenzar a escribir el próximo capítulo de tu vida, si sigues leyendo lo que ya escribiste”.

Mucha gente se convierte en el producto de su pasado. Son la causa de los arrepentimientos, la tristeza, los “si hubiera” y la visión retrospectiva. A pesar de que podemos aprender de nuestro pasado, mantenernos ahí no es para nada práctico para vivir el presente. El pasado no puede ser modificado o revivido.  Revivirlo constantemente no crea perspectivas emocionalmente saludables.

15-  Piensas constantemente en el futuro y no puedes disfrutar el hoy.

“Lo que haces hoy, determina quién serás en el futuro.”

Algunas personas se focalizan demasiado en las estrellas y se pierden las vistas del viaje, las experiencias, las lecciones aprendidas para llegar allí. Trata de encontrar tanto placer en la aventura como en llegar a la meta. Si no puedes, solo sentirás frustración hasta que tu futuro se haga realidad.  Hasta que esto pase, ¿por qué limitarte cuando también puedes encontrar felicidad en la búsqueda de lo que tiene planeado como destino?

16-  No gozas de buena salud.

“La forma en la que piensas, en la que te comportas y en la que comes pueden influenciar tu vida por los próximos 30 a 50 años” – Deepak Chopra.

Dependiendo de cuanto valores la  actividad física, una dieta saludable, las técnicas de reducción del estrés  y dormir, ese será el impacto que tengan estas actividades sobre cuán feliz te sientas. Las emociones están ligadas a muchas propiedades físicas del cuerpo. La conexión entre el cuerpo y la mente es muy real y la mayoría de las veces, hacer un poco de ejercicio, un poco de sol, dormir un poco más y una dieta más saludable mejoran tus emociones de forma inmediata.

17-  Eres un perfeccionista.

“Para seguir viviendo uno debe tratar de escapar la muerte que trae consigo el perfeccionismo” – Hannah Arendt.

Hay tres clases de perfeccionismo: El auto perfeccionismo en el que se espera que nosotros mismos seamos perfectos; el perfeccionismo social en el que uno cree que los otros esperan que uno sea perfecto; y el otro del otro, del cual uno espera que los otros sean perfectos.  Los tres ejemplos pueden ser asesinos de la felicidad. Ser perfecto es una meta totalmente irreal tanto para uno como para los otros. Debido a que la perfección nunca se alcanza, este hecho se encargará de aportarte cuotas de tristeza en forma permanente.

18-  Temes al fracaso.

“El éxito nunca es definitivo, y las fallas no son fatales, es la valentía de continuar lo que realmente vale” – Winston Churchill.

Algunas personas están tan temerosas de cometer errores que nunca intentan hacer nada. ¡Imagínate si esto hubiese sucedido cuando aprendías a caminar! Probablemente todavía estarías gateando. Desafortunadamente algunos pierden su valentía cuando son adultos y le temen a cualquier cosa debido a que ésta podría no funcionar. Si te aferras a esta idea, nunca serás capaz de vivir de acuerdo a todo lo que tu potencial te permita. Esto puede generar un gran grado de insatisfacción en tu vida.

19-  Eres Inseguro.

“La meta que debemos imponernos no es sentirnos seguros, sino ser capaces de tolerar la inseguridad” Erich Fromm.

El crecimiento se produce siempre fuera de nuestra zona de confort. Si eres demasiado inseguro como para moverte fuera de lo que te es familiar, nunca entenderás la dicha de conquistar tus miedos y encontrar tus alas. Después de todo, en algún momento un pájaro tuvo que dar un salto para descubrir que podía volar.  No puedes estar en el nido para siempre y ser feliz viendo a otros  planear.

20-  Estás endeudado.

“Un hombre endeudado es un esclavo.” – Ralph Waldo Emerson.

Demasiadas deudas pueden causar estrés, destruir relaciones y generar apuros financieros.  Lograr trazar un plan que te permita salir del yugo de las deudas puede brindar mucha paz mental.

21-  Estás en búsqueda permanente de validación.

“Aprende primero a amarte a ti mismo, antes de amar la idea de que otros te amen.”

Si estás permanentemente mirando a los otros para determinar cuánto vales, siempre te desilusionarás. Ninguna otra persona más que tú tiene el poder de determinar tu felicidad o lo que vales.

22-  Desatiendes las relaciones personales.

“No elijas a aquellos que son hermosos para el mundo; elige a aquellos que hacen que tu mundo sea hermoso.”

La mayoría de las confesiones en los lechos de muerte no tienen que ver con haber pasado más tiempo encadenado a una oficina o haciendo dinero. La mayoría de la gente se arrepiente de las relaciones que desatendió en búsqueda de cosas que de repente perdieron importancia. Recuerda, no abandones a tus amigos o a tu familia. Esas son las cosas que finalmente son más valiosas.

23-  Dejas las cosas para después.

“Conoce el valor del tiempo; aprópiate, atesora y disfruta cada momento. No estés ocioso ni haraganees, no dejes para después, nunca pospongas para mañana lo que puedes hacer hoy.”  – Lord Chesterfield.

Posponer cosas es una espiral sin fin que lleva siempre a la frustración. Cuánto más lo haces, más pesada se hace la carga. Es como tratar de correr una maratón mientras levantas rocas a lo largo del camino. En algún momento la carga será muy pesada.

Debes terminar los proyectos y dejar caer esas rocas para estar liviano y poder maniobrar sin arrastrar otros proyectos que has pospuesto.

24-  No estás aprendiendo.

“Es viejo, quien deja de aprender, ya sea a los veinte o a los ochenta. Cualquiera que sigue aprendiendo permanece joven. La cosa más maravillosa de la vida es mantener tu mente joven.” – Henry Ford

Aprender nuevas cosas trae aparejada felicidad al descubrir el crecimiento. Si has dejado de aprender, entonces busca un nuevo hobby o interésate por algo nuevo. Hallarás en el entusiasmo por aprender un nuevo manantial.

25-  Tienes sueños no realizados.

“Todos tu sueños pueden volverse realidad, si tienes el valor de perseguirlos.” – Walt Disney

Los fantasmas de nuestros sueños muertos nos pueden perseguir. Afortunadamente, siempre estás a tiempo de dar un nuevo impulso a tu vida y encontrar el valor para seguir nuevas y excitantes posibilidades.

26-  Estas aburrido.

“La vida del hombre creativo está liderada, dirigida y controlada por el aburrimiento. Evitar el aburrimiento es uno de nuestros propósitos más importantes.” – Susan Sotang

Mucha gente va por la vida sin ningún desafío, y eso puede llevarlos al aburrimiento. Después de todo, las comodidades que brinda la tecnología, las normas de seguridad, y las facilidades que brinda la vida moderna pueden quitar el aspecto aventurero de nuestras vidas. Mucha gente se encuentra  atascada en una rutina, y se aburre sin nada que hacer.  Hay muchas formas de encontrar algunas cosas alocadas en tu vida. Simplemente tienes que ponerte la meta de hacer cosas que te asusten un poco y que te devuelvan al camino de las asombrosas aventuras que la vida tiene disponibles para ti.

27-  Estas demasiado ocupado.

“No digas que no tienes suficiente tiempo. Tienes la misma cantidad de horas por día que las que tenían Helen Keller, Pasteur, Miguel Ángel, la Madre Teresa, Leonardo Da Vinci, Thomas Jefferson, Albert Einstein, etc…”

Si pasas tu tiempo estando ocupado en vez de focalizarte en las cosas que te hacen sentir vivo, te encontrarás con que la felicidad es como una persecución infructuosa. En vez de simplemente estar ocupado, aprende a focalizar tu tiempo para que sea efectivo a la vez de dejar de perder tiempo en las cosas que no contribuyen para nada en obtener lo mejor de la vida. Después de todo, puedes encontrar muchas maneras de utilizar tu tiempo que en realidad no te llevan a ti a ninguna parte.

28-  No duermes lo suficiente.

“Amo dormir. Mi vida tiene una tendencia a desmoronarse cuando estoy despierto, ¿sabes?  – Ernest Hemingway.

La gente que sufre de insomnio tiene diez veces más posibilidades de sufrir depresión en comparación con los que pueden dormir bien. Los desórdenes del sueño han sido asociados con otros problemas de salud. Por eso, si no estás durmiendo bien, es hora de remediar dicho asunto.

29-  No pasas suficiente tiempo solo.

“La soledad es el lugar de la purificación.” – Martin Buber

Algunas veces, simplemente no nos tomamos el tiempo para alejarnos del ruido de la vida para rejuvenecer nuestras mentes y focalizarnos en nuestro interior.  Está bien tomarse el tiempo para estar solo con el objetivo de relajarnos; ya sea para tomar un café en el banco de una plaza o tomarse un fin de semana para recorrer a pie las montañas de Alaska.  Sin importar como pases tus momentos de soledad, no te olvides de tomarte el tiempo para dar un paso al costado de la locura de la vida y refocalizarte. Tu mojo mental te lo agradecerá.

30-  No te tomas el tiempo para ponerte objetivos.

“Ponerse objetivos es el primer paso para tornar lo invisible en algo visible.” –Tony Robbins.

Una vida sin propósitos es una fuente de descontento y frustración. En vez de solamente dejar que las cosas te pasen y tratar de mantenerlas, crea tu propio futuro poniéndote objetivos y siguiendo el camino que te lleva a ellos. Uno de los grandes placeres de la vida es ver los frutos de haber logrado un objetivo.

31-  Eres dependiente.

“Los más grandes regalos que puedes dar a tus hijos son las raíces de la responsabilidad y las alas de la independencia.” –Denis Waitley

A pesar de que puede ser más fácil depender de otros, volverse independiente es uno de los hitos de ser adulto. Aquellos que se aferran a otros, sin planes de ser libres con frecuencia  deben pelear con su propia autoestima. Es difícil encontrar tus alas cuando estas sobrecargado por las agendas de otras personas.

32-  No crees que mereces ser feliz.

“Todos merecemos la felicidad o ninguno de nosotros la merecemos.” – Mary Gordon

Algunas personas tienen la idea de que no merecen ser felices. Pueden sentirse culpables por su pasado y sentir que deberían ser castigados, o simplemente no se sienten suficientemente valiosos como para sentir esa emoción. La felicidad es algo que todo el mundo debería experimentar. Si no te sientes merecedor de ella, es tiempo de que reajustes tus perspectivas. Date permiso para encontrar tu lugar feliz.

33-  Siempre estás un paso atrás.

“La codicia es un pozo sin fondo que deja a las personas exhaustas en un esfuerzo sin fin para satisfacer las necesidades sin siquiera tener alguna satisfacción.” – Erich Fromm

Si eres una de esas personas que siempre está un paso atrás de lograr la satisfacción, esto hará mella en tus posibilidades de ser feliz. Si todo está fuera de tu alcance, nunca te será posible hallar diversión en lo que tienes y en cada momento que se te da. Si siempre hay algo que necesitas para llenar tu vida, ¿Cuándo crees que esto terminará? La mayoría de la gente que piensa  de esta manera, nunca será capaz de satisfacer al monstruo de la codicia que llevan dentro. Realmente creen su propia mentira,  en la que si obtienen esta última cosa, hallarán la felicidad. Aquellos que han aprendido a disfrutar del momento, en vez de posponer la dicha para un futuro distante que nunca ocurrirá, descubrirán que aman la vida mucho más que aquellos que siempre están tratando de llenar ese pozo sin fondo.

34-  Ignoras las oportunidades.

“Mucha gente pierde las oportunidades ya que está vestida de mameluco y se ven  como el trabajo.” – Tomas Jefferson

Algunas veces, cuando la oportunidad llega y golpea nuestras puertas, la gente decide simplemente seguir mirando TV y no responder a esa llamada. La oportunidad en general se ve como esfuerzo o suele sacar a la gente de su zona de confort, por lo que deciden dejarlas pasar. Sin embargo, si esto se convierte en un hábito, te hallarás frustrado cada vez que veas aquellas cosas que dejaste pasar y a las que deberías haberte aferrado con cada fibra de tu cuerpo. Es muy difícil ser feliz cuando no puedes aferrarte a las c osas buenas que vienen hacia ti. Asume el riesgo y salta; puedes realmente sorprenderte de cómo cambiará tu vida.

35-  Estas satisfecho de ti mismo.

“No dejes que tu carácter especial, tus valores, el secreto que sabes solamente tú, la verdad, sean tragadas por la autosatisfacción.” – Esopo

Es muy fácil autosatisfacerse. Sin embargo, puedes abandonar este monstruo en cualquier momento y comenzar a nada hacia un futuro mejor en vez de flotar hacia donde las aguas te lleven. Hay gozo en la lucha, gozo que nunca experimentarás si tienes una existencia pasiva.

36-  Odias tu trabajo.

“Cualquier cosa en la que trabajes, hazla bien.  Un hombre debería hacer su trabajo tan bien que los vivos, los muertos y los que todavía no nacieron no puedan hacerlo mejor.” – Martin Luther King Jr.

Pasas la mayor parte de tu vida en el trabajo. Por eso, si estás en un trabajo que odias, es realmente difícil encontrar una perspectiva feliz. La mejor manera de cambiar tu vida es comenzar a trabajar por lo que te apasiona y no por un sueldo.

37-  Persigues las cosas incorrectas.

“Cuando dejas de perseguir las cosas incorrectas, le das la chance de alcanzarte a las cosas correctas.”

Algunas veces nos confundimos acerca de lo que realmente es importante para nosotros.  Haz un viaje profundo hacia el interior de ti mismo para descubrir lo que realmente valores y deja de perder tiempo en perseguir cosas que realmente no son importantes.

38-  No tienes vida espiritual.

“En la calma mental de la vida espiritual, he descubierto que las respuestas a los por qué de nuestras vidas finalmente son capaces de llegar.” – Clarence Clemons.

Muchos estudios han mostrado una correlación entre la vida espiritual y un incremento en la felicidad. Ser parte de un grupo de personas que se focalizan en ayudar a otros y en amar incondicionalmente a otra gente ciertamente te ayudaría a encontrar un objetivo en la vida. Mucha gente, también encuentra en las plegarias y en la meditación un modo de obtener calma y beneficios para su bienestar emocional. Todos estos factores, así como muchos otros, contribuyen a construir una mejor perspectiva mental para la gente que está ligada al reino de lo espiritual.

39-  No tienes amigos verdaderos.

“Hacer cientos de amigos no es un milagro. El milagro es hacer un solo amigo que estará junto a ti aún cuando cientos estén en contra tuyo.”

A pesar de que tu mundo puede estar lleno de conocidos, si no tienes unos pocos amigos cercanos que estén junto a ti sin importar cuán brava sea la tormenta, te hallarás en un estado de profunda tristeza. La vida se trata de conectarse con la gente, y si no estás muy seguro de cuan fuertes son tus amistades, quizás sea el momento de encontrar algunos amigos de esos que siempre estarán allí para ti. Te sentirás mucho más confiado acerca de tu futuro sabiendo que siempre estarás respaldado.

40-  Tienes temor de ti mismo.

“Estoy segura de no tener miedo al éxito y he aprendido a no tener miedo a fallar. La única cosa a la que realmente le temo es a ser alguien que no me gusta mucho.” – Anna Quindlen

Por más extraño que parezca, muchos temen ser ellos mismos y no confían en sus propios instintos. Es cierto que nadie es perfecto,  y si no puedes confiar en ti mismo, ¿en quién puedes confiar entonces?  Aprender a tener fe en tus propias decisiones y en  el curso de tu vida te permitirá crear un viaje con muchas más satisfacciones que si estás constantemente dudando de ti mismo.

41-  Te preocupas demasiado por lo que otros piensas.

“Muchas personas compran cosas que no necesitan, con dinero que no tienen, para impresionar a gente que no conocen.”

Una vez que aceptes la realidad de que no se puede complacer a todos, la  vida se vuelve mucho más sencilla. En realidad, tener como objetivo complacer a todo el mundo simplemente te volverá loco.  No hay forma de vivir si constantemente resuenan en tus oídos lo que otros piensas y dicen de ti. Libérate del círculo vicioso de complacer a otros y aprende a vivir tu propia vida.

42-  No te relajas.

“Tener fe significa confiar tu ser al agua. Cuando nadas no tratas de aferrarte al agua, porque si lo haces te hundirás y te ahogarás.  Simplemente relájate y flota.”  – Alan Watts

Todo trabajo y ninguna diversión siempre te alejarán de la felicidad. Todos necesitamos un poco de tiempo para relajarnos. Si no tenemos el suficiente seguramente estás peleando por alguna frustración y el estrés que no te dejan relajarte. Aprende a poner en un lugar de privilegio el aprendizaje de cómo relajarte. Tu salud mental y física mejorará dramáticamente si aprendes a tomarte un tiempo para descansar y rejuvenecer.

43-  No asumes riesgos.

“Solamente aquellos que se arriesgan a ir demasiado lejos encuentren posiblemente cuán lejos uno puede llegar.” T.S. Elliot

Mucha gente no lleva su vida hasta el límite. Si te sientes sin desafíos o que tu vida no tiene cambios, quizás sea el momento de asumir algunos riesgos e ir un poco más allá de lo que estas acostumbrado.  Puedes hallarte explorando territorios nunca vistos, mientras tu amigos intentan devolverte al confort de lo familiar. El entusiasmo de traspasar tus límites anteriores crea una existencia entusiasta.

44-  Eres impaciente.

“Nunca cortes un árbol en el invierno. Nunca tomes a decisión negativa cuando no estés bien. Nunca tomes tus decisiones más importantes cuando no estés de buen ánimo. Espera. Se paciente. La tormenta pasará. La primavera llegará.” Robert Schuller.

Siempre he luchado contra la paciencia. Es tan difícil esperar, pero a veces es todo lo que puedes hacer. Cuando aprendes a afrontar los momentos en que las circunstancia te obligan a esperar, trata de mantener una visión positiva de la situación. Después de todo, el tiempo igual pasará; puedes elegir estar calmado y tomarte tu tiempo para tomar la mejor de las decisiones, o puedes desviarte abruptamente y que ese desvío te lleve por una ruta mucho peor.

45-  No aprendes de tus errores.

“No puedes cambiar cuando te niegas a confrontar.”

¿No has notado que hay algunas personas que parecen no aprender jamás? Aún cuando siempre llegan a resultados horribles, continúan con el mismo patrón de autodestrucción. Estos es muy fácil verlo en otros, y es muy difícil reconocerlo en uno mismo. Si algo va mal, por más tentador que sea eliminarlo de nuestra memoria, es mejor pensar cómo llegamos a esos resultados indeseados y como evitaremos replicarlos en el futuro. Nuestros errores tiene un propósito, no importa cuán dolorosos sean, necesitamos aprender de ellos.

46-  No tienes un perro.

“Un perro es la única cosa en el mundo que amas más que a ti mismo.” – Josh Billings

La terapia de mascotas es muy efectiva, es utilizada en hospitales, casas de retiro,  y hasta las agencias  post- desastre la utilizan. Los estudios muestran que cuidar a nuestros animales libera oxitocina, una hormona que nos hace sentir bien, tanto al humano como al animal.  Salta a la vista que tener a nuestra mascota moviendo la cola y con sus ojos de cachorro es una buena terapia que hace que sonrías y tu día sea más brillante.

47-  Igualas  el confort con la felicidad.

“Las culturas occidentales estamos  un poco atrasadas. Pensamos que si tenemos todo el confort disponible, seremos más felices.  Igualamos el confort a la felicidad. Sin embargo estamos tan bien desde el punto de vista del confort y aún así nos sentimos miserables. No hay lucha en nuestras vidas. No hay sentido de la aventura. Nos subimos al auto, luego  a un elevador, todo es fácil. De lo que me di cuenta es cuando me siento más vivo es cuando estoy empujando y cuando siento dolor, cuando estoy luchando por lograr algo y en esa lucha creo que hay magia.” – Dean Karnazes

El hecho de que tengas confort en el trabajo y en tu vida, no significa que seas feliz. Aprende a distinguir entre esos dos sentimientos. Puedes descubrir que aunque tengas una vida confortable, igualmente estás lidiando con la depresión. Si es así, trata de encontrar lo que te hace feliz y persíguelo aún a costa del confort.

48-  No te amas a ti mismo.

“Si eres feliz, puedes brindar felicidad. Si no te amas a ti mismo y eres infeliz, no puedes dar nada más que eso.” Gisele Bundchen

Es imposible encontrar felicidad si no te amas a ti mismo lo suficiente para perseguirla. A pesar de que puede ser difícil salir del ring de boxeo, es hora de que dejes de golpearte y aprendas a amar a la persona que ves en el espejo.

49-  Juegas la carta de la víctima.

“Es difícil ser feliz cuando el mundo conspira contra ti. La gente que asume el rol de víctima nunca es feliz. Esto se debe a que no tienen el control. Creen que su infelicidad es causada por factores externos. Viven en el miserable país del “Si ocurriera…”.”

Si vives tu vida como una víctima también te has creído la mentira de que no tiene el poder para cambiarla. Esa no es manera de aferrarse a una existencia significativa. Cambia tu sistema de creencias y asume la responsabilidad de tus acciones y las consecuencias que de ellas deriven. Nunca entregues tu poder a alguien más.

50-  No te permites ser feliz.

“¿Sabes por qué es tan difícil ser feliz? Porque nos rehusamos a dejar ir a las cosas que nos entristecen.”

¿Por qué te aferras a aquellas cosas que te hacen infeliz? Es una pregunta que deberías hacerte. Algunas veces, conscientemente elegimos la infelicidad porque no podemos dejarla ir. O, sin saberlo, la elegimos porque no hemos estudiado lo suficiente nuestras vidas para descubrir que es lo que necesitamos eliminar. La elección de ser feliz en definitiva está en tus manos. La felicidad no debe ser necesariamente escurridiza. Algunas veces, todo lo que tienes que hacer es abrir la puerta a las desafiantes posibilidades que tienes ante ti.