1. No dejarás tu carro en un estacionamiento vacío.
Hay dos tipos de personas en el mundo: 1) Aquellos que devuelven los carros a su lugar y 2) Los cabrones. Dejar un carro para que vuelva solo a su lugar, usualmente se transforma en que aparecerá en el estacionamiento de alguien cuando ya esté entrando al parking y, viéndolo, deba retroceder enfadado, causando innumerables malestares a quienes vienen detrás. Los carros tienen su lugar, ayúdelos a llegar a él.
2. No caminarás por el medio del estacionamiento.
No tienes súper poderes peatonales como para ignorar a las personas que van en coche. Camina por un costado – cualquiera – y nadie saldrá herido.
3. Recorrerás los pasillos como una persona civilizada.
Hacia un lado por la derecha, hacia el otro por la izquierda. Si estás bloqueando el centro o el lado equivocado y golpeas mi carro, podríamos entrar en problemas. También trata de evitar dar una vuelta en 180° en un pasillo atestado de gente sólo para pasearte mirando como si estuvieras en el Louvre. Es sólo sopa. No la Capilla Sixtina.
4. Obedecerás las reglas de las filas expreso.
El aviso dice 15 artículos o menos. No dice, “todo lo que puedas poner adentro del carro pequeño que elegiste en vez del normal”. Esto no se refiere a la cantidad de tipos de artículos, sino a la cantidad total. Por ejemplo, esos 75 tarros de sopa que te demoraste 15 minutos en sacar, no cuentan como un artículo. No eres tan especial. Si todos ignoraran esta regla, sería una fila normal.
5. No te arrepentirás de la pizza congelada que sacaste de la sección congelados, dejándola al lado del champú.
¿De verdad? ¡Vamos, gente!
6. Respetarás el espacio personal invisible en la caja de pago.
No importa cuánto te acerques o cuántos artículos tires en la cinta, vienes después de mi. Si continúas acercándote, pretenderé que reviso mis cupones por un largo tiempo o me pondré a conversar con la cajera… a menos que quieras pagar mi compra. En ese caso, tenemos un trato.
7. Tratarás a la cajera con respeto.
Esto implica no conversar por teléfono mientras ella marca tus compras o molestarte porque ella no acepta tus cupones vencidos que pensaste que ignoraría. Si te pillan tratando de pasar un cupón vencido, déjalo estar. Son 35 centavos menos de jabón de platos. Sobrevivirás.
8. No te detendrás en la salida a revisar la cuenta.
Una vez que te han dado tu cuenta y los 300 papeles que vienen con ella, no te detengas a leerla como si fuera un mapa del tesoro. No hay nada tan importante en ese papel que justifique el detenerse y causar atasco. Muévete.
9. Reconsiderarás las cajas autoservicio.
Acepta tus límites. ¿Puedes encontrar el código de barra en un producto? ¿Eres capaz de calzar el dibujo de los plátanos en la pantalla con los plátanos en tu carro? ¿Sabes alisar los billetes para insertarlos en la ranura? Si respondiste “no” a cualquiera de estas preguntas, no seas un héroe. Pasa por la caja normal.
10. No acosarás por un estacionamiento.
Finalmente, no conduzcas despacio detrás de mí impacientemente esperando mi estacionamiento. Casualmente está a dos estacionamientos de distancia de otro disponible. A menos que vayas a ayudarme a poner mis compras en el maletero de mi coche, tu insistencia en quedarte ahí acelerando el motor de manera impaciente, me obligará a hacer un chequeo completo de mi coche – interior y exterior – antes de volver a entrar e irme 5 minutos más tarde.
Gracias por comprar con nosotros.
Que tenga un buen día.