Aunque es maravilloso compartir un viaje especial y las nuevas experiencias con los amigos, la pareja o la familia, existen argumentos muy atractivos para viajar solo de vez en cuando. Viajar sin compañía puede funcionar para cualquiera, ya sea que estés soltero o en una relación, seas extrovertido o introvertido… Y hay 8 buenas razones por las que deberías intentarlo:
1. Simple logística
Puede ser un desafío coordinar un viaje con varias personas. Cada uno tiene unos horarios y planes que impiden que se coincida para viajar. Usualmente, este desafíos puede ser superado simplemente planeando todo con mucha anticipación. Pero si de pronto te das cuenta que quieres tiempo para descansar y no puedes encontrar a un compañero de viaje sin previo aviso, podría ser el momento perfecto para empacar tus maletas e ir de todas formas.
2. Trabaja en tu lista de pendientes
¿Hay algo que te mueres por hacer y que nadie está dispuesto a hacer contigo? Tal vez te gustaría saltar en paracaídas sobre el Gran Cañón, ver las antiguas Ruinas Mayas, o simplemente comer una verdadera langosta de Maine. Está bien si tu pareja o amigos no comparten ninguno de tus intereses. Lo que no está bien es que sacrifiques tus sueños, especialmente cuando lo único que tienes que hacer es llegar al lugar.
3. Eres una gran compañía para ti mismo
Si rara vez pasas tiempo solo, te podría sorprender lo agradable que puede ser. ¿Cuándo fue la última vez que de verdad escuchaste sólo a tus pensamientos y no te preocupaste de entretener a nadie excepto a tus sueños? Dependiendo del destino, un viaje solo puede ser una experiencia poderosa, introspectiva y que te puede cambiar la vida.
4. Conocer nuevas personas
Si naciste extrovertido, viajar solo puede ser una forma maravillosa de conocer a la gente local y hacer nuevos amigos. A menudo, la gente que está sola parece más cercana para otros. Antes de que te des cuenta, podrías estar conversando con algunas personas interesantes al costado de un café. O incluso podrías unirte a un grupo con los mismos intereses. La clave es mantener una mente abierta al mismo tiempo que mantienes tu seguridad, especialmente en una tierra extrajera.
5. Haz todo lo que quieras y nada que no quieras hacer
¿Has sentido alguna vez dudando acerca de pasar medio día en el spa que tanto ansías porque te sentías mal de dejar a tu compañero de viaje sin nada que hacer? Cuando viajas solo, no estás obligado a entretener a nadie más que a ti mismo. Si quieres pasar el día en un bar al aire libre, tomando mojitos en vez de ir a turistear, no tienes que darle explicaciones a nadie.
6. Sin drama
Algunas veces cuando estás soltero, esperas a estar en pareja antes de irte de vacaciones. Estos viajes pueden fortalecer o destruir tu relación. Si las cosas no van bien, el viaje entero puede ser una tortura, lleno de drama que preferirías olvidar. Cuando viajas solo, puedes dejar de esperar a ese “alguien” para irte de vacaciones. En vez de eso, puedes seguir yendo solo hasta que encuentres una persona que realmente valga la pena.
7. Gran servicio
Por alguna razón, el servicio en los hoteles y restaurantes parece ser mucho mejor cuando viajas solo. La gente tiende a admirar a aquellos que viajan sin compañía, y es posible que cuando lo des a conocer puedas recibir una mejor habitación.
8. La ausencia hace crecer el cariño
No estoy sugiriendo que pases todas tus vacaciones lejos de tu pareja, pero hacerlo de vez en cuando puede ser refrescante para una relación. Cuando estableces el precedente de que está bien perseguir los intereses individuales, la confianza aumenta. Llegar a casa, después de un viaje solo, puede recordarles a cada uno por qué se aman. Si encuentras un lugar precioso cuando estás solo, siempre puedes llevar a tu amor ahí la próxima vez.
