Por Teresa Donoso
29 septiembre, 2014

En 1967, Los Beatles lanzaron una canción que hasta el día de hoy se mantiene como un himno de la amistad: “I get by with a little help from my friends” (Sigo adelante gracias a la ayuda de mis amigos).

Todos sabemos que estos lazos hacen más que sólo ayudarnos cuando lo necesitamos. Los amigos son nuestros eternos compañeros. Son los que vienen a tu departamento sólo para matar una araña; son la única constante entre las relaciones de pareja y los cambios de trabajo. Hay investigaciones que afirman que las amistades nos hacen vivir por más tiempo.

Aristóteles alguna vez dijo “la amistad es un alma que habita en dos cuerpos”, pero ¿qué es lo que diferencia a una verdadera amistad de los lazos pasajeros? De acuerdo a Robert Rowney, psiquiatra certificado y director de la unidad de trastornos del humor de la Clínica Cleveland, hay ciertos hábitos que distinguen a los verdaderos amigos, y que los hacen parecer un miembro de la familia. Son esos hábitos, más la facultad de muchas veces tener que decir la verdad aunque duela, lo que crea el indescriptible lazo de una amistad verdadera.

A continuación encontrarás 11 cualidades que distinguen a una amistad de verdad, de otro tipo de relaciones en nuestra vida.

1. Nos motivan a aceptar más cosas de nosotros mismos.

2

Todos solemos ser bastante autocríticos y no siempre somos constructivos con nosotros mismos. Rowney señala que los verdaderos amigos nos animan cuando estamos siendo extremadamente negativos  y afirma que “las personas se sienten mejor cuando están rodeados de personas cercanas, que les brinden apoyo y ánimo cuando lo necesiten”.

Ya sea porque no nos gustó nuestro desempeño en una entrevista de trabajo o porque no nos gusta el reflejo del espejo, nuestros amigos más cercanos son los que expresan su desacuerdo cuando estamos siendo muy duros con nosotros mismos. “Los amigos de verdad aumentan nuestra autoestima de forma natural, y a su vez, el animar a un amigo, nos hace sentir mejor con nosotros mismos”.


2. Nos dicen cuando no estamos en lo correcto.

No, no sólo para llevarnos la contra, sino cuando realmente estamos cometiendo un error. Nadie es perfecto. Nuestros amigos son capaces de detectar nuestras fallas y señalarlas cuando lo necesitamos. “Son capaces de indicar tanto lo que hacemos bien como lo que hacemos más, y son capaces de darnos el apoyo que necesitamos en ambos casos”.

La dosis justa de sutileza al momento de decir la verdad es una de las cosas que distingue a los verdaderos amigos. “Si es un amigo reciente o no tan cercano, no se va a atrever a decir algo que pueda molestarte; en cambio un amigo verdadero, alguien en quien realmente confías, sabrá cómo decirte lo que necesitas escuchar. Es muy importante tener amigos que sean claros y directos”.


3. Puedes contar con ellos

3

El mejor regalo que un amigo te puede dar es su más absoluta atención y preocupación, y los verdaderos amigos lo saben, por lo que se preocupan de estar presentes. “Un verdadero amigo está presente al considerar tus necesidades como propias” afirma Rowney.

¿Sabes de que forma un amigo puede demostrar su completa atención hoy en día? Poniendo su teléfono en silencio cuando está contigo. Un estudio del Reino Unido del año 2012 sostiene que la simple presencia de un teléfono puede distraerte cuando estás con alguien, algo que tu mejor amigo/a no dejaría que ocurriera.


4. Nos escuchan de verdad

Todos hemos hablado con alguien que no puede evitar cambiar el tema para hablar de sí mismo, y eso no es precisamente lo que buscamos cuando queremos desahogarnos y hablar sobre nuestros problemas. Las conversaciones con nuestros verdaderos amigos no son monólogos.

Ser capaz de sostener un diálogo abierto con alguien más aumenta las posibilidades de que esa relación se fortalezca. De acuerdo al experto Paul Sacco, PhD y profesor ayudante de la escuela de trabajo social de la Universidad de Maryland, la clave de una conversación balanceada es prestar atención activamente a lo que está diciendo la otra persona. “Las personas que son buenas para escuchar validan los sentimientos de las otras personas” señaló en HuffPost Healthy Living, “les demuestran que lo que están diciendo tiene sentido y vale la pena”.


5. Nos acompañan en los momento difíciles

4

Una cosa es contar que personas que te felicitarán y apoyarán durante tus momentos de éxito, pero los amigos de verdad están durante los altos y bajos; las penas, las alegrías, los fracasos y todo lo que pueda pasar. “Conocer y confiar lo suficientemente en alguien como para aceptar que te acompañen durante un momento es difícil, es un signo de amistad de verdad”, afirma Rowney, “quienes están en tu vida incluso en ese tipo de instancias, son prácticamente familia”.


6. Nos mantienen tranquilos

Uno de los principios fundamentales de una amistad verdadera, es saber lo que estresa o relaja al otro. Los amigos genuinos pueden detectar los momentos de estrés y dificultad, y por lo tanto pueden ayudar a tomar mejores decisiones. Incluso cuando no estamos buscando un consejo, su simple presencia puede calmarnos. Un estudio del año 2001 postula que el simple hecho de pasar tiempo con un amigo cercano ayuda a bajar los niveles de estrés.


7. Nos ayudan a mantener los pies en la tierra

5

Rowney afirma que si bien los verdaderos amigos celebran nuestros logros como si fueran de ellos, también son los que nos recuerdan nuestros inicios.”Los buenos amigos estarán pendientes de que no se te suban los humos a la cabeza, ya que te conocían antes de que lograras cumplir un objetivo importante; saben quien eres en realidad, por lo que no sólo celebrarán tus logros sino que también serán tu cable a tierra”.


8. Nos dan su apoyo, incluso en las situaciones más complicadas.

Imagina lo siguiente: vas a comer con algunas personas del trabajo y ves a la pareja de tu mejor amigo coqueteando con alguien más. Si bien contar algo como eso no es nada de fácil, Rowney señala que los amigos cercanos siempre toman la iniciativa y hacen lo correcto, incluso si se trata de contar algo que probablemente tu amigo no querrá oír. “El apoyo es crucial en una amistad. La honestidad no es un valor fácil de cumplir, pero es fundamental para fortalecer la relación. Ver más allá de nuestra propia comodidad y actuar como el mejor amigo que puedes llegar a ser, siempre funciona”.


9. Hacen de la amistad una prioridad.

6

El matrimonio, el trabajo, los hijos…a medida que pasa el tiempo, nuestras vidas se vuelven más ajetreadas, y por lo tanto nuestra disponibilidad disminuye. Sin embargo, los verdaderos amigos no permiten que la vida se interponga en la amistad. Ya sea planeando una simple llamada desde el auto, o un almuerzo rápido, los amigos de verdad consideran a sus más cercanos una prioridad.

“Uno de los grandes obstáculos de las amistades es cuando las personas no se dan el tiempo para estar con sus amigos”, declara Rowney, “Si no te esmeras en hacer un espacio en tu vida para ver a tus amigos más cercanos, el tiempo los va a distanciar, y esa es una de las principales razones por las que las amistades terminan diluyéndose”.


10. Son capaces de perdonar.

Todos cometemos errores de vez en cuando. Pero como describe Randy Tara, autora y productora de Project Happiness (Proyecto Felicidad), las amistades verdaderas saben cómo llamar a la calma “cuando hay un conflicto, los amigos de verdad tienen el valor de enfrentar el problema en lugar de hablar por la espalda y alimentar el resentimiento. Los amigos de verdad son capaces de entender, y esto los lleva a ser capaces de perdonar”.


11. Nos hacen querer ser mejores personas

7

Rowney señala que los amigos de verdad no sólo nos acompañan durante nuestro crecimiento, sino que también nos motivan a querer ser una mejor versión de nosotros mismos. Los amigos no sólo son nuestros confidentes, sino que también nuestros modelos a seguir. A través de su ejemplo, amabilidad y otros atributos, los amigos de verdad sacan lo mejor de nosotros, y esa es una de las mejores cosas que nos pueden dar.

Original