Por Candela Duato
12 octubre, 2014

1. A los dos, apenas pueden hablar. A los tres nunca se callan.

2. A los dos, lloran. A los tres hacen berrinches tan épicos que te convences que están poseídos por el diablo.

3. A los dos, se comen felices cualquier cosa que les des. A los tres, sólo comen 3 cosas (mezclado con patatas o queso fundido).

4. A los dos, tardas 10 minutos en bañarlos y el resultado es un niño limpio. A los tres, los baños te toman más de una hora y el resultado es un baño mojado, una mamá empapada y 16 toallas usadas.

5. A los dos, usan pañales que pueden ser cambiados cuando lo necesites. A los tres, empiezan a ir solos al baño y el mundo gira alrededor de sus vejigas.

6. A los dos, puedes distraerlos con una caja de cereal en el supermercado. A los tres, quieren decidir toda la comida que comprarás.

7. A los dos, te dejan que los vistas, viéndose inocentes y adorables. A los tres, insisten en elegir su propia ropa.

8. A los dos, no les gusta ensuciarse. A los tres, les encanta ensuciarse.

9. A los dos, puedes hacer cosas por ellos ahorrándoles mucho tiempo. A los tres, quieren hacer todo por ellos mismos y tardan LA VIDA ENTERA.

10. A los dos, la manipulación es lo último que se les podría ocurrir. A los tres, te manejan. Y lo saben.

Original.