A veces, los momentos más sorprendentes están a la vuelta de la esquina y no tienes idea de lo que viene. Eso es lo que pasó en ese día soleado, cuando un agente de aparcamiento andaba repartiendo multas para los ciudadanos desprevenidos que no hicieron nada para merecerlo. Bastante terrible, ¿no?!
Pero bueno… solo tienes que mirar lo que pasa después
httpv://youtu.be/pmmowYQKmIA