Siempre es admirable que las personas de otros países y con lenguas distintas mantenga sus nombre originales, a pesar de la presión cultural. En EE.UU. fue y sigue siendo muy común cambiar los nombres a versiones en inglés. Como Ramón a Raymond, pero ¿Qué pasa con Facundo?
httpv://youtu.be/SBxD2lSBRtg