Por Ignacio Mardones
17 abril, 2015

Una extraña situación que de seguro contará cuando vuelva a casa.

Era un día normal para este ejecutivo que pretendía tomar un avión, hasta que se acercó a la encargada del vuelo y en pocos segundos el entorno cambió dramáticamente. Una a una fue sumándose la gente que estaba alrededor hasta hacer de esto un evento masivo. La línea aérea planeó todo para la celebrar a su pasajero número 500.000. Así es como el afortunado reaccionó ante la sorpresa:

httpv://youtu.be/zDQzLqwElGM

¡Podría tocarte a ti!