El espectáculo más grande de la tierra, se trata sobre una niña de madera

Marionetas gigantes que parecen vivas, caminando por la ciudad y sorprendiendo a todos.

¿Te imaginarías a los protagonistas de “Los viajes de Gulliver” saliendo de sus páginas, o por ejemplo, a gigantes descendido desde un enorme tallo de habichuelas? La verdad es que el artículo a continuación trata sobre liliputienses y gigantes, pero que visitan las principales ciudades del mundo, para convertirlas en los escenarios más grandes que puedas imaginar.

Se trata de la compañía francesa de teatro callejero Royal de Luxe, que fue fundada en 1979 por Jean Luc Courcoult en Aix, Provence, y que tiene como atracción principal estas marionetas gigantes que son creadas con madera de álamo.

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Éstas, miden hasta 12 metros, representan a humanos y animales, y son capaces de caminar, abrir y cerrar los ojos, e incluso, respirar al inflar sus pechos, gracias a la ayuda del sistemas de poleas y palancas hidráulicas que son dirigidas por entre 20 a 40 operarios cada una.

Las personas a cargo de hacerlas parecer vivas, son mejor conocidos como liliputienses, y la verdad, es que provienen de todas las naciones (entre ellos, hay inventores, poetas, profesionales, técnicos de teatro y recolectores de basura, que se han visto atraídos por la magia de las tablas).

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Y bueno, como expliqué en el título… toda esta historia gira en torno a una pequeña de vestido verde que se ve envuelta en las aventuras más impresionantes.

Jason Wells

Las aventuras de la pequeña varían. En una ocasión, cientos de personas vieron a un elefante mecánico gigante caminar por el centro de Londres, Inglaterra -en la actuación que se conoce como “El Sultán del elefante”-, en dónde había un sultán que soñaba con una niña y viajaba en su elefante a través del tiempo para encontrarla. Otra vez, en Santiago de Chile, una mañana como cualquiera en medio de la calle se podía ver una colisión de dos buses del transporte público, además de postes de señalización y alumbrado público destruido. Todo esto tenía como único culpable a un rinoceronte de 3 metros que se escapó de África, y el cuál sólo la niña, por su tamaño y valentía, podía volver a encerrar.

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¿Quieres conocer un poco más de esta compañía y sus magníficas marionetas? Entonces revisa las fotos a continuación y ruega para que pronto viajen a tu país y puedas disfrutarlas:

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