Estas villas suizas se ven normales pero no creerás la historia que guardan

Abre bien los ojos porque te están engañando.

Si ves estos chalets por primera vez verás que no hay nada extraño con ellos, pero te aconsejo que vuelvas a mirar de nuevo. Claro que a simple vista son comunes y corrientes porque tienen ventanas, persianas, cortinas y todo lo que un chalet suizo debería tener, pero no es así. Aunque se vean ideales para tomar un descanso o vacacionar, esconden un secreto que no muchos conocen.

Christian Schwager

¿Quieres saber qué son en realidad? Bueno, son antiguos búnkers militares muy bien camuflados. Así es, nada de típicos chalets suizos, sino que en su interior guardan habitaciones escondidas que hoy podrás conocer.

Christian Schwager

Puede ser difícil de creer pero esa es la verdad, todo gracias a el fotógrafo Christian Schwager, quien decidió hacer una serie de fotografías titulada “Chalets Falsos”.

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Él fue quien sacó a al luz estos chalets falsos, los que ocultan historias militares suizas en sus refugiados e impresionantes búnkers. Fue tanto el impacto que ni siquiera los residentes de la zona sabían cuál era la realidad, incluso desconocían que los militares hubiesen siquiera visitado aquel lugar.

Christian Schwager

Él cree que por lo menos hay 250 búnkers escondidos, los cuales están ocultos tras fachadas comunes y corrientes. Ha visitado todos los que ha encontrado para fotografiarlos y todavía le quedan muchos por descubrir: imágenes aéreas que fueron tomadas hace años, muestran que estos fueron creados a partir de la Segunda Guerra Mundial.

Christian Schwager

En vez de construir típicas estructuras de cemento, el gobierno optó por una idea muy inteligente y los construyeron con fachadas de hormigón para que fueran más sutiles.

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Esta idea también ayudó a Suiza con sus paisajes perfectos porque incluso los turistas pensaban que eran antiguas casitas en las praderas. Lo más importante era que debían parecer casas normales a una distancia de más de 20 metros para pasar desapercibidas.

Christian Schwager

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Ya conociendo cuáles son las entradas secretas, hay algunos que están abiertos para que se puedan visitar.

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Incluso una de ellas es conocida como la Villa Rosa, que tiene sus puertas abiertas al público, donde todavía se puede ver el armamento que contenían, las tuberías, cámaras y las habitaciones que fueron utilizadas en esa época. Ésta fue restaurada en 2006 y hoy es parte del patrimonio europeo.

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Muchos de ellos fueron demolidos, pero Schwager los ve como obras de arte que deben ser apreciadas y guardadas a través del tiempo. Aunque no todas son iguales, hay otras que ni siquiera tienen hormigón en sus murallas, sino que simplemente tienen capas de tierra o mantas de colores que cubren sus entradas.

Christian Schwager

¿Puedes ver que ocurre cuando se mueve una manta? ¿Ves esa entrada? ¡Qué miedo!

Christian Schwager

Como si fuesen maestros del disfraz, los suizos lograron camuflarlas mucho mejor y realmente, es impresionante ver la técnica que utilizaron. Nadie se imaginaba que una cueva o la cima de un precipicio, podría ser en realidad un búnker de guerra.

Christian Schwager

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Si tienes la suerte de viajar a Suiza y encuentras chalets como estos, no dudes en entrar a aquellas que están abiertas al público, porque de todas formas encontrarás algo asombroso en su interior.

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